42 Investigación en Salud. Dimensión Ética
Aparecería luego la figura decisiva de Hen-
ry H. Beecher, quien publicaría un libro
en 1959, “
Experimentation in Man
”. En
1963 sucede otro caso tristemente famo-
so, el del
Jewish Chronic Disease Hospital
,
de
Brooklin
,
New York
. Allí se inyectaron
células cancerosas de forma subcutánea a
pacientes ancianos, sin su consentimien-
to y –desde luego– sin información. Ese
año, Beecher publica un editorial impor-
tante
(8)
que ayuda, junto con su libro y
su promoción, a que en Helsinki, Finlan-
dia, en 1964, durante la 18ª Reunión de
la Asociación Médica Mundial, se redacte
la conocida Declaración. Un par de años
después Beecher denuncia investigaciones
con serios problemas éticos, por ejemplo,
que sólo en dos casos de 50 se contaba
con el consentimiento de los sujetos par-
ticipantes –relación riesgo/beneficio muy
alta– y elección de la muestra en grupos
vulnerables
(9)
.
En 1972 Jean Séller publica un artículo
en la primera página del
New York Times
,
dedicado al ahora conocido caso Tuske-
gee. En esa población muy pobre, del
Condado de Macon en Alabama, se había
iniciado una investigación hacía ya 40
años. En 1932 se identificaron 400 varo-
nes negros, que tenían sífilis y que no ha-
bían recibido tratamiento alguno. Dos-
cientos sujetos funcionaron como grupo
control
(10)
. A los participantes nunca se
les informó que estaban formando parte
de una investigación; tampoco que existía
tratamiento eficaz disponible (como la
penicilina desde 1941). Y para 1972 ya
existía el Código de Nuremberg y la De-
claración de Helsinki. ¿Qué estaba pasan-
do entonces?
Por otro lado, también en 1972 un diario
norteamericano informó que el
National
Institute of Health
(NIH) financiaba un
ciones imperativas en tiempo de guerra y con
condenados a muerte, que el sacrificio de
algunos podría redundar en el beneficio de
muchos, o que no existían patrones éticos
que regularan tal actividad
(6)
. El resultado
fue la redacción del Código de Nuremberg,
con lo que se cierra el segundo períodomar-
cado por Gracia, con el establecimiento de
un código que exalta al consentimiento in-
formado y el respeto a la autonomía en la
participación en investigación clínica (aun-
que haya datos como las leyes de 1931, y
más aún, que sugieren que podría haber es-
tado reconocido de alguna manera desde
finales del siglo XIX)
(7)
. Al año siguiente
del Código de Nuremberg, la ONU adop-
ta la Declaración Universal de los Derechos
Humanos.
Sin embargo, en 1956, cuando no habían
pasado siquiera diez años de Nuremberg,
en la
Willowbrook State School
(una insti-
tución para niños con retardo mental en
Staten Island, NewYork
) se da un caso sin-
gular. En esa fecha un grupo de investiga-
dores inocula deliberadamente con hepa-
titis a los niños que ingresan para estudiar
la historia natural de la enfermedad. Lo
que alegaron posteriormente en su defen-
sa fue que de todas formas la contraerían
(casi todos los niños con más de seis me-
ses de estancia la contraían por transmi-
sión fecal), así que no se les estaba produ-
ciendo ningún perjuicio, y que, además,
los padres firmaron su acuerdo con tal
procedimiento. No aclararon que, si no
aceptaban firmar, el ingreso del niño que-
daba condicionado.
1964: Declaración de Helsinki
1975: Tokio
1983: Venecia
1989: Hong Kong
1996: Sudáfrica
2000: Edimburgo
1...,32,33,34,35,36,37,38,39,40,41 43,44,45,46,47,48,49,50,51,52,...391