Página 67 - Obras completas de don Andrés Bello: Volumen X : Derecho internacional
Versión de HTML Básico
DE LA NACIN
I
EL
SOBERANO
33
desmembracin
ele
un
estado
antiguo,
a
los dems estados
solo
toca
averiguar
si
la
nueva
asociacin
es
independiente
de
hecho,
i
ha
establecido
una
autoridad
que
dirija
a
sus
miem
bros,
los
represente,
i
se
haga
en
cierto
modo
responsable
de
su
conducta
al
universo.
I
si
es
as,
no
piueden
justamente
dejar
de
reconocerla,
como
un
miembro de la
sociedad
de las naciones.
En
el
caso
de sepiararse violentamente de
una
antigua
nacin
i constituirse
en
estados
independientes
una o
mas
de las
pro
vincias
de
que estaba
aqulla
compuesta,
se
ha
pretendido
que
las
otras
naciones
estaban
obligadas
a
respetar
los derechos
de la
primera,
mirando
a
las
provincias
sepiaradas
como
rebel
des
i
negndose
a
tratar
con
ellas. Mientras dura la
contienda
entre
los
dos
partidos,
no
hai
duda
que
una
nacin extraa
piuede
abrazar la
causa
de
la
metrpoli
contra
las
provincias,
si
lo
cree
justo
i
conveniente,
as
como
la
do
las
provincias
contra
la
metrpoli
en
el
caso
contrario. Pero
una vez
que el
nuevo
estado
u
estados
se
hallan
en
posesin
del
poder,
no
hai
ningn
principio
que
prohiba
a
los
otros
reconocerlos
por
tales,
piorque
en
esto
no
hacen
mas
que
reconocer
un
hecho
i
mantenerse
neutrales
en una
controversia
ajena.
Las
provin
cias
unidas de los Pases
Bajos
habian sacudido
el
yugo ele la
Espaa
antes
de
espirar
el
siglo XVI,
pero
la
Espaa
no re
nunci
sus
derechos
sobre ellos hasta
la paz
de
Westfalia
en
1648;
i
las
otras
naciones
no
aguardaron
esta
renuncia
piara
establecer
relaciones
directas
i
aun
alianzas ntimas
con
aquel
nuevo
estado. Lo mismo sucedi
en
el intervalo
entre
1640,
en
que
el
Portugal
se
declar
inclepiendiente
ele
la
Espiaa,
i
1668
en
que
la
Espaa
reconoci
esta
indepiendencia.
Pero
semejante
conducta de
parte
de
las
otras
naciones
no
solo
es
lcita,
sino
necesaria,
porque,
como
expuso
Mr.
Canning
en su
nota
ele
25
de
marzo
de
1825
al
seor
Rios,
ministro
espaol
en
la
corte
ele
Londres, justificando
el
reconocimiento
ele los
nuevos
estados americanos por la Gran Bretaa:
Toda
nacin
es
responsable
de
su
conducta
a
las
otras,
esto
es,
se
halla
ligada
al
cumpilimiento
de
los
deberes que
la naturaleza
ha
prescrito
a
las
pueblos
en
su
comercio
recpiroco,
i
al
resar
cimiento
do
cualquiera
injuria
cometida por
sus
ciudadanos
o
DCHO. INT.
5
