Derechos humanos y relaciones internacionales - page 57

tal modo generalizada que ella. había alcanzado al propio ejército re–
guIar, de lo que ,dan muestra los levantamientos militares de Carúpano
y
Puerto Cabello, donde actuaron entremezclados grupos de ultraiz–
quierda,
comunista~
y
soldados·
y
oficiales del ejército regular. Además,
la guerrilla reclutaba a sus militantes no sólo en la izquierda sino en
el propio partido de gobierno. Agreguemos, fin'almente, que esos años
eran en Venezuela de pobreza y escasez: muy lejos de la actual bo–
nanza petrolera, el país vivía una crisis económica grave. No obstan.
te ésta y muchas otras dificultades, los gobiernos venezolanos tuvieron
un éxito notable. La subversión fue derrotada sin necesidad de renunciar
a la democracia y, por el contrario, esta última salió notablemente
robustecida. La lucha contra la subversión no exigió
la
privación de
los derechos de los sindicatos, gremios estudiantiles, universidades o
partidos políticos.,
Las características de la estrategia antisubversiva de Betancourt,
Leon! y Caldera fueron, grosso modo, las siguientes. En primer lugar,
la
aplicación irrestricta del viejo principio de von Clausewitz de la
plena subordinación del aparato militar al poder civil. En segundo
lugar, la operación de los servicios que luchaban .contra: la subversi6n
-militares, policiales, .de .inteligencia o de cualquier otra índole–
bajo el control y dentro del marco de la ley; obviamente hubieron
excesos, lo que siempre ocurre y que por lo mismo la ley debe prever,
pero ellos fueron castigados de acuerdo a la norma legal y sus culo
pables arrastrados a la cárcel cumpliendo largas condenas. En tercer
lugar, el cuidado por parte. del poder político, de' que las medidas
militares -vale decir la aplicación de violencia por el gobierno–
guardaran justa proporción con la violencia de los subversivos; de
esta manera,
el
gobierno siempre estaba atento de que una sobrerres–
puesta militar le pudiera causar molestias innecesarias e injustas a la
población civil. En cuarto lugar, la aplicación de una combinación
de medid'as políticas y militares, en donde las primeras tenían notable
importancia; al respecto quisiera citar la llamada política: de pacifica–
ci6n del Presidente Rafael Caldera, quien concedió a los guerrilleros,
a cambio del 'abandono de la lucha armada,
el
derecho a reintegrarse
a la vida nacional en plenitud, incluso a la vida política. Hoy, en
Venezuela, nadie tiene dudas de esta política de pacificación la que,
'además, es considerada como uno de los más fuertes golpes' a la idea
de la vIolencia política.
57
1...,47,48,49,50,51,52,53,54,55,56 58,59,60,61,62,63,64,65,66,67,...241
Powered by FlippingBook