POLÍTICA NUCLEAR
ben nuestras instituciones proteger la ciencia porque ella es parte
de nuestro patrimonio cultural, y un país que no tiene cultura es
un país que no existe. Por ello es que debemos permanentemente
insistir en que se haga ciencia en Chile, como una necesidad bá–
sica más.
A partir de la segunda guerra mundial han existido experiencias
muy interesantes acerca de la interacción que discutimos. En Israel,
por ejemplo, que es un país nuevo pero con una gran capacidad de
iniciativa y cuyo caso, respetando las escalas correspondientes, bien
nos podría servir como modelo, la Comisión de Energía Atómica
reúne científicos de variadas especialidades, incluyendo la física "pu–
ra" y las matemáticas. Esto no se hace por casualidad, sino que es
el
fruto de una cuidadosa meditación, que ha llevado a la conclu–
sión de que éste es el esquema conveniente, lo que constituye sin
duda un antecedente valioso, que no debemos ignorar.
También en América Latina hay una experiencia interesante en
el caso de Bariloche. La Comisión Nacional de Energía Atómica dé
la Argentina, en asociación con la Universidad Nacional de Cuyo,
administra una escuela de física en lo que constituye un excelente
ejemplo de una buena interacción institucional. Esta iniciativa no
solamente tiene la importancia de haber formado físicos de presti–
gio internacional, sino, y muy especialmente, de haber permitido
una continuidad en el proceso científico, de la física en particular,
en el vecino país. A pesar de períodos políticos de gran turbulencia,
de problemas en las universidades y de otras y grandes dificultades
en la Argentina, Bariloche significó siempre la oportunidad de con–
tinuar hadendo ciencia en forma ininterrumpida. De este modo,
a través de un núcleo pequeño pero de calidad, la ciencia en Argen–
tina pudo sobrevivir a muchos procesos que de otra manera la ha–
brían afectado gravemente.
Esta experiencia debe ser observada cuidadosamente, pues permi–
te extraer ,conclusiones válidas en torno a un esquema muy exitoso,
particularmente si se considera
el
hecho de que todos los países la–
tinoamericanos son susceptibles de incurrir en condiciones de gran
inestabilidad política.
A nivel internacional debe también mencionarse el caso del Cen–
tro Internacional de Física Teórica de Trieste, que cuenta desde su
comienzo con el auspicio del Organismo Internacional de Energía
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