XII
DERECHO INTERNACIONAL
manos,
i
la mitad
de
sus
habitantes,
reducida
a
mendi
cidad,
vive
de
la
distribucin
de
limosnas.
Para
la
segu
ridad de
las
grandes
ciudades
fabricantes,
se
ha
hecho
necesario acantonar
tropas
que
pongan
silencio
a
los
clamores,
i
repriman
los tumultos
ele
los
miserables
obreros.
Mr.
Peel,
congratulndose
de
los felices
efectos
ele la
emancipacin
de los
catlicos,
ha
dicho
al
parla
mento
que el
gobierno
habia
podido
ya
sacar
ele
Irlanda
tres
rejimientos
cjue
estaban
empleados
all
en
contener
a
la
poblacin
desafecta,
para
aumentar
con
ellos
la
fuerza
militar
de los distritos fabricantes. La
conserva
cin
de
la
preponderancia
industrial de la
Gran
Bretaa
es
indispiensable
para la de
su
poder
poltico,
i
aqulla
no
puede
subsistir
sino
al
abrigo
de
un
vasto i
dispen
dioso
establecimiento
militar.
Las
rentas
actuales
del
gobierno
bastan apenas para los
gastos
internos,
reduci
dos al
pi
de paz,
i
no
es
posible
aumentarlas
sin
au
mentar al
mismo
tiempo
i
en una
espantosa
proporcin,
el
peso
enorme
de
la
deuda
pblica,
i
el
gravamen
de las
clases
productoras,
que
estn
ya
demasiadamente
ago
biadas. La
Inglaterra
en
estas circunstancias
no
piuede
contemplar
sin
horror
la idea
de
nuevas
expiecliciones
al
continente
i
nuevos
subsidios
a
las
potencias
aliadas;
i
nos
inclinamos
a creer
cpue,
si
la
revolucin
de
sus
veci
nos no
toma
un
aspecto
ominoso
a
la
estabilidad del
presente
equilibrio
europeo, los
votos
del
pueblo
i
del
gabinete
britnico
propendern
a
la piaz.
En
vista
de
todo,
no nos
parece
cpue
se
deba dar
mu
cho crdito
a
los
pronsticos
de
una
guerra
continental
en
Europa,
ni
desespieramos
de que las cmaras
lcjisla-
tivas
de la
Francia,
ilustradas
por
la
experiencia,
proce
dan
con
un
espritu
de
circunspeccin
i
templanza
que
1...,2,3,4,5,6,7,8,9,10 12,13,14,15,16,17,18,19,20,21,...637