Max Weber ha ejemplificado a Benjamín Franklin como el re–
presentante del espíritu y del estilo de vida capitalista. Según él, este
espíritu está presente durante la colonia:
"The colonial outlook may be described as an expression of a
middle class psychology which exalted industry and thrift and
which exposed both a core of utilitarianism overlaid with reli–
gious tradition and a spirit of individualism tempered by coope–
ration and association."
6
La influencia de estos valores éticos
y
religiosos concluyeron en
la formación de un tipo de economía política del desarrollo norte–
americano, que contrasta con Jos valores no capitalistas de Hispano–
américa.
La herencia colonial inglesa, a diferencia de España, era capitalista
y
protestante
y
fue transferida a través de sus colonos en América.
Como afirma Weber, el calvinismo impulsaba a realizar el mejor
papel posible dentro de cualquier actividad y racionalizar al máximo
la vida para evitar la condenación; en la práctica esto significa:
"That God helps those who help themselves. Thus the Calvinist,
as it is sometimes put, himself created his own salvation
01',
as
would be more correct, the eonviction of it. But this creatíon can–
not, as in Catholicism, eonsist of a gradual accumulation of in–
dividual good work's to one eredit, but rather of a systematic self–
control which at every moment stands before the inexorable al–
ternative, chosen
01'
dammed."
7
El espíritu empresarial, el ideal del "self_made man" y la norma
del trabajo compulsivo formula:ban una predisposición inicial hada el
trabajo y la vida que sin duda se reflejarán en el comportamiento
internacional. Por ejemplo, el "Idealismo Moralizante" que cree por
sobre todo en la perfectibilidad de las sociedades
y
carece de la su–
fkiente paciencia para esperar que otros busquen sus propios caminos
de estilos políticos
y
de desarrollo económico.
El deseo de hacer cosas en forma rápida
y
eficiente ha enredado
las relaciones entre l;a Metrópolis y la Periferia
y
ambas resultan de–
cepcionadas por este activismo
y
perfeccionismo de la Metr6polis.
De
~sta
manera, los factores domésticos y la herencia colonial arco–
jan perspectivas sobre la metamorfosis de la Periferia Americana, en
una nación independiente.
En el campo diplomático, durante la preparación de la etapa del
despegue, el desborde inicial del destino manifiesto se hizo sentir por
primera vez en México.
6
Max Weber, Protestantism anil the Spírít of Capítalísm (New York,
1948),
p.
460.
7Ibid., pp.
338-339.
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