'\
Walter Sánchez.
G.
I
LAS TENDENCIAS SOIlRESALlE'-;TI':S DE LA POLÍTICA EXTERIOR.••
motivaciones más positivas que han influido en la conducción política
de la diplomacia chilena. \Para explicar al pueblo las deósiones
di–
plomáticas los gobiernos han recurrido
la'
imágenes, valOTes y símbolos
políticos que se repiten en el tiempo
y
mediante las cuales han bus–
cado un respaldo internlO
y
externo! para sus diferentes estrategias
internacionales. 'Estas lCreencias
¡al
su ¡vez han sido el reflejo de un
estilo de cultura ci'VÍca nacional que se proyecta en la política inter-
nacional.
Estas tradiciones son recur,rentes en el tiempo, a tnavés de al menos
37 administraciones en las cuales sólo un /Canciller ha Logrado ter–
minar el período completo de su Presidente y cuyos signos ideológicos
han variado con el .correr de los años. Más allá de los gobiernos
y
cancilleres, parece que permanece un cemento ideológico común que
es el sustrato
y
la materia prima que alimenta nuestra vida internacio–
nal. Más 'que una descripción del grado de eficacia de los distintos
gOibierno's nos interesa desliacar aquellos aspectos positivos de estas
tradiciones diplomáticas sin dejar de ,reconocer que existen elementos
negativos, omisiones
y
a veces errores que se han producido invocando
estos valores :que son parte de la personalidad internacional del país.
¡Las raíces domésticas de estas tendencias son fenómenos sociales,
culturales
y
políticos que lha-n maTeado nuestro sistema de alianzas
diplomáticas
y
el funciommiento de la política exterior chilena,
..
dándole un perfil diplomMico "s,u.i generis".
..
Sin neg¡ar que el Presidente
y
la Cancillería son los canales consti–
tucionales de la acción internacional, nuestro interés radica en ¡revelar
estos procesos profundos más que explicar
la
personalidad o estrate-
gia de los distintos ¡gobierno\'). Sin duda que la sicologha! de los !Pre–
sidentes
y
Cancilleres, además del paJP,el del personal especializado
han sido factores que han condicionado la conducta internacional del
país, pero ellos a su. vez han sido el reflejiO' de situaciones internas
de orden político, social
y
económico.
Desde la perspectiva del científico- político, estas tendenctas
y
con–
tinuidades no son ni buenas ni malas; loables o condenables, pacifistas
o belicosas. Nos interesa¡ mostra.r cómo est'as fuentes de politicas in–
ternacionales han. influido. en la positiva acomodación del interés
nadonal en el contexto regional
y
mundial.
La
poÍítica exterior
re~
quiere de una legitimidad que sirve de respaldo moral
y
popular a la
• acción internacio:ual
y
ésta descansa en la armonización de la libertad
con el orden
y
la solidaridad con. el interés nacional. Estas tendencias
son indivisibles entre sí, pero a veces el1ltran en confliéto; pOT ejem–
.,¡
plo, a veces las tensiones entre nacionalismo
y
americanismo se con-
375
