Página 61 - Los quinientos años de Santiago y el segundo milenio de la aldea de Huechuraba

A esas coordenadas de apoyo se les denomina de diferentes maneras según
la época y según la materia de que se trate y, así encontramos, los principios, los
valores, los axiomas, los secretos, los mitos, los misterios, el tiempo, las medidas,
etc.
Con esas coordenadas se han edificado la magia, el lenguaje, la escritura,
la ciencia, la filosofia, la técnica, la religión, la ética, el arte, la historia, la
sociedad, el gobierno, etc.
El hombre ha creado un sub-mundo, con un reticulado cada vez más
complejo del mundo que sus sentidos le muestran, para sostenerse y alentarse en
el inmenso Universo que le causa pavor y desesperación, y en el cual nunca
entenderá por qué existe.
Preocupado de ese pequeño sub-mundo propio, de su invensión, se siente
más seguro, le da algún sentido a su vida, justifica su acción, se aliena para lograr
sus objetivos artificiales y se embriaga con sus propias palabras. Por fin, seguro
de su superioridad en esa falsa realidad que con artificio simple ha creado, se
siente poderoso, inteligente, rico, hermoso, santo, justo y sabio.
La limitada comprensión del espacio universal y del tiempo infinito hacen
que el hombre no sea capaz de comprender nada más allá de la "burbuja"
mensurable que lo rodea.
¡¿Quién, realmente, puede pensar con seriedad a mil años en el futuro o en
el pasado, quién puede pensar a mil años en el espacio, quién puede pensar en
dimensiones demográficos, económicas, sociales, culturales, de mil veces lo que
nos rodea?!
Nuestros planes no sobrepasarán más <:le un par de generaciones venideras,
no entenderemos nunca más allá de un par de generaciones pasadas, no
captaremos jamás el espacio de las estrellas. Nuestras mayores aventuras
espaciales por el Universo alcanzarán a ser representadas sólo por un punto en el
infinito.
Nadie puede hacer Historia, la Historia, se hace sola y mucho después.
Nadie puede apoderarse de ella, nadie puede manejarla. Sólo el tiempo ubicará
los hechos presentes en la Historia Blanca, Roja, Negra o Incolora que
corresponda, sin saber nosotros ahora, qué color tiene realmente, o el que se
suponga pueda tener.
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