Control biológico de enfermedades de las plantas en Chile - page 25

25
Ortega
et al
., 2002
Fanta
et al
., 2003
Ortega
et al
., 2005
Citrus limon
Alternaria alternata
Trichoderma harzianum
Fanta
et al.,
1992
Pérez
et al
., 1994a y 1994b
Lycopersicon
esculentum
Fusarium solani
Trichoderma harzianum
Pérez
et al
., 2001b
Fragaria chiloensis
Botrytis cinerea
Capacidad biocontroladora de hongos del género
Trichoderma:
su relación
con la HR y con isoenzimas de quitinasas
Los estudios a nivel molecular de hongos del género
Trichoderma
se comenzaron a
realizar en paralelo con los estudios moleculares en los sistemas modelo (Gutiérrez
et al
.
1998, García
et al.
2000, Roco y Pérez 2001, Besoaín
et al
. 2001, Montealegre
et al.
2005),
junto a la búsqueda de nuevas cepas de hongos y de bacterias biocontroladoras
(Montealegre
et al.
2002, Montealegre
et al.
2003).
Los hallazgos de la inducción de proteínas PR como quitinasas y glucanasas en la HR
desarrollada por plántulas de limonero inoculadas con
A.
alternata
y el efecto de estas
enzimas sobre el desarrollo de
A. alternata
(Fanta
et al.
2003), sugirieron que este tipo de
enzimas podría estar involucrada en el biocontrol. Es así como al desarrollar a
T. harzianum
en medios de cultivo con paredes de diferentes fitopatógenos, se estableció su capacidad
para secretar quitinasas, glucanasas y proteasas. En aquellos casos en que
T. harzianum
secretaba un mayor número de isoenzimas en presencia de paredes de un determinado
fitopatógeno, existía una relación directa entre número de isoenzimas y capacidad para
controlar a ese fitopatógeno. Un ejemplo de este hallazgo se encuentra en los resultados de
biocontrol realizados contra
Pyrenochaeta lycopersici
usando diferentes cepas silvestres de
T. harzianum,
donde la multiplicidad de isoenzimas de quitinasas secretadas por la cepa
Th11 se relaciona directamente con su capacidad para controlar a dicho patógeno (Pérez
et
al.
2001a, Pérez
et al.
2002, Pérez 2005).
La inducción de quitinasas y de glucanasas también se evaluó en plántulas de tomate,
luego de inocularlas con
Fusarium solani
, o con
Trichoderma harzianum
, o con ambos
(Pérez
et al
. 2001b). Se estableció que ambos microrganismos inducían quitinasas en la
planta pero a tiempos diferentes. Las quitinasas inducidas luego de la inoculación conjunta,
correspondían solamente a las relacionadas con la inoculación con
T. harzianum
, situación
en la que las plántulas de tomate se mantenían sanas. Sin embargo, los ensayos de
antagonismo directo de
T. harzianum
enfrentado a
F. solani
mostraron una inhibición parcial
del desarrollo del patógeno, sugiriendo la necesidad de contar con microorganismos con una
mayor capacidad antagónica.
Mutantes: una alternativa para la obtención de mejores biocontroladores
La necesidad de contar con cepas con una mejor actividad biocontroladora y con un
mayor espectro de acción, llevó a la generación de mutantes a través de tratamiento de
cepas silvestres de
Trichoderma
con cloruro de guanidinio (Zaldívar
et al.
2001, Pérez y
Morales 2003, Pérez
et al
. 2007), o con luz ultravioleta o a través de fusión de protoplastos
(Besoaín
et al
. 2007). Estos mutantes se ensayaron para el control de
Rhizoctonia solani
y
de
Phytophthora nicotianae
(Arias
et al.
2006) y de
Pyrenochaeta lycopersici
La mutante de
1...,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24 26,27,28,29,30,31,32,33,34,35,...147
Powered by FlippingBook