LA POLfTICA MUNDIAL HACIA EL SIGLO XXI:
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sociedad. A pesar del enciclopedismo, de las estrecheses y purgas políticas
intennitentes, Argentina tiene tres Premios Nobel en Ciencia y Chile dos Premios
Nobel en Literatura. Estos focos de reflexión científica, poética y filosófica,
entreabren una ventana de oportunidades para que en
el
futuro de América Latina
y Chile, la Ciencia y la Cultura se transfonnen en un Nuevo Mundo a ser
conquistado. Introducir la Ciencia en la sociedad para poder "aprender a apren–
der" y para que su destino no sea manipulado por las potencias que tienen el
conocimiento y la tecnología.
Si se acepta el desafío de subirse al carro de la era Científico-Tecnológica, es
más fácil poner en práctica el principio de "conócete a ti mismo" y hacer un
esfuerzo por descubrir la identidad de nuestra región, más allá de los fantasmas e
ideologismos.
¿Por qué motivos cuando los latinoamericanos somo invitados desde el Norte
tenninamos acurrucados en el pasado? Al respecto, Vargas Llosa declaró a El
Mercurio (25,
III,
1984): "Hoy como ayer luchamos contra fantasmas, y por
razones bastante similares: la ideología, que es la religión contemporánea y nos
hace confundir la presa con la sombra".
Mirar al pasado y acurrucarse en el calor de ideologías es el producto de una
crisis de identidad. Resuelta la crisis de identidad es posible orientarse hacia el
futuro.
La objetivación de nuestro conflicto de identidad es la piedra angular para
cualquier ejercicio de prospectiva. En este sentido es posible prognosticar un
movimiento en aumento para una autodefinición de la región. El intento de
distanciarse de las posiciones de los países rectores de Occidente cuando no
existan intereses convergentes irá en ascenso hacia el fin de siglo. Más que un
no-alineamiento al estilo africano o asiático, América Latina se está alineando
consigo misma para ver hacia qué lado se inclinará. Parte esencial de la familia
occidental, nuestro continente se mantendrá ep esta alianza y en este estilo de
vida, pero con una fisonomía cada vez más diferente en todos los aspectos.
Como fruto de esta mayor equidistancia en la competencia intraimperial y
entre los grandes países, el papel de la región frente a los mundos nuevos que
surgen en el Atlántico y el Pacífico, en el Norte y el Sur se irá redefiniendo según
sus propios intereses. El mundo de la ciencia y de la infonnática también es un
"Nuevo Mundo" que irá siendo absorbido. en fonna selectiva y crítica por
América Latina.
Frente a una economía política dirigida por las potencias del Norte y donde
las distancias entre los centros disminuyen a una velocidad mayor que con las