Las frágiles clases medias.
Estudios sobre grupos medios en Chile contemporáneo -
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Acerca de la desigualdad social: repertorios culturales de evaluación
necesariamente trazar diferencias y similitudes con los otros sujetos que los rodean, produ-
ciendo así y de forma indirecta un sistema de tipificación. Los seres humanos nos definimos
a nosotros, nuestra personalidad y cualidades únicamente de forma relacional (Lamont,
1992); este proceso sirve para entendernos a nosotros mismos, para darle un significado a
nuestros actos y pensamientos y para mantener una autoestima elevada en comparación con
aquello que no nos gusta, que nos genera vergüenza o que simplemente queremos evitar. A
nivel macro-sociológico, sostiene la autora, el
boundary work
sirve para dar orden a las co-
munidades instalando normativas colectivas acerca de lo que es valorable y lo que no lo es.
Por otro lado, los límites simbólicos son distinciones conceptuales creadas por los ac-
tores sociales para categorizar objetos, personas, prácticas e incluso tiempo y espacio. Son
herramientas que crean, mantienen, responden y disuelven diferencias sociales y que son
utilizadas por individuos y grupos sociales para llegar a acuerdos acerca de la realidad social.
Más aún, es posible señalar que los sujetos no solo construyen límites a partir de su propia
experiencia, sino que también, utilizan herramientas colectivas que se encuentran en los
repertorios culturales de evaluación disponibles socialmente, confiando en las definiciones
sociales más generales (Lamont, 1992). Examinar los límites simbólicos permite capturar la
dinámica de las relaciones sociales, ya que estas separan y dividen a las personas en grupos
y generan sentimientos de similaridad y membresía dentro de los grupos de pertenencia
(Lamont y Virág, 2002).
Con respecto a lo anterior, Lamont (2002) se enfoca en tres tipos de límites simbólicos,
específicamente, los límites morales, los límites socioeconómicos y los límites culturales. En
cuanto a los primeros, la autora señala que estos tienen como base el carácter moral, y se
fundan en cualidades tales como la honestidad, el trabajo ético, la integridad personal y la
consideración por los demás. Referente a los límites socioeconómicos, estos se dibujarían en
base a juicios sobre la posición social de las personas a través del éxito profesional, el dinero,
el poder y el status. Finalmente, en cuanto a los límites culturales, estos se basarían en el ni-
vel educativo, la inteligencia, los modales, los gustos y el desenvolvimiento dentro de la alta
cultura. Asimismo, estos límites (Fuller, 2003) emergen por medio de la interacción volvién-
dose dominantes, prevaleciendo en un tiempo y contexto determinado atravesando y opo-
niéndose a aquellos anteriormente creados, por lo que tienen carácter más bien dinámico.
Por otra parte, los
límites sociales
refieren a las formas objetivadas en que se estructuran
y manifiestan las diferencias sociales, lo que se observa en el acceso inequitativo y desigual a