Sistematización de la experiencia "El Rincón de la Mujer Mapuche"

83 Consideramos interesante ahondar en esta diferencia con las observaciones generales: en salud y en organizaciones de base comunitaria vemos una participación mayoritaria de mujeres. Como ya señalaban Velásquez y Martínez (2004): “Una de las características de la participación de las mujeres ha sido el involucramiento en actividades que están más asociadas a las labores de su hogar o tienden a un carácter de cuidado hacia otros, en contraposición con las características de la participación masculina (Eagly & Crowley, 1986 en Flanagan et al., 1998; Sabatini, 1995; Serrano et al., 1999). En este sentido, desde la década de los 80, Gilligan (1985) ha realizado contribuciones importantes para entender la incidencia del género en la construcción de ciudadanía y la participación social y política a partir de sus estudios de la Teoría del Desarrollo Moral de Kohlberg.” Probablemente, la mayor participación femenina se da por la asociación del tema de la salud a los cuidados, ambos asociados a lo femenino en nuestra cultura patriarcal. Ello explicaría el mayor interés femenino en participar en un proyecto ligado a la salud. Por otra parte, este proyecto se promocionó, buscando interesar a eventuales participantes, principalmente a través de los Consejos de Desarrollo Local de Salud, instancias participativas de los centros de salud, donde también la participación es básicamente femenina. Pese a fijarnos como objetivo que participaran más hombres y realizar cambios estructurales como el horario facilitador, no logramos vencer los prejuicios culturales que asocian salud a lo femenino. En otras palabras, pensamos con anticipación en posibles barreras estructurales como el horario, pero no le dimos suficiente relevancia a lo cultural, especialmente en términos de género. Otro elemento que probablemente incide en la mayor participación de mujeres es que en este proyecto no se disputaban cargos o intereses de poder, lo que

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