Seminario Internacional : Profesión docente y educación continua en América Latina : aprendizajes y desafíos

67 SEMINARIO INTERNACIONAL PROFESIÓN DOCENTE Y EDUCACIÓN CONTINUA EN AMÉRICA LATINA: APRENDIZAJES Y DESAFÍOS etapa en que se encuentren. Una vez aprobados por el Consejo Nacional de Educación (CNED), serán un gran aporte para la educación del país. A su vez, también debemos enfocarnos en el diseño instruccional de los cursos formativos que gestionamos como Ministerio y que son impartidos mayoritariamente por universidades o ins- tituciones sin fines de lucro. La idea es rescatar la experiencia de aprendizaje de los docentes y situarlos como aprendices. Todo docente o educador que participa de una acción formativa se da cuenta que una “buena clase” es aquella donde se le modela una enseñanza innovadora. Como personas adultas sabemos que aprendemos cuando el nuevo conocimiento nos hace sentido y cuando le vemos un propósito. Lo que nos queda es lo que vivimos, la experiencia relevada. Para apuntar hacia este objetivo, debemos trabajar de forma coordinada con estos organismos, de manera de crear nuevos proyectos de formación continua que transiten hacia el paradigma de desarrollo profesional y les hagan sentido a los maestros, invitándolos a ser parte de ellos. De esta manera, podremos avanzar hacia lo que la literatura ha ido reconociendo como “de- sarrollo profesional efectivo” en términos de contribuir al cambio de práctica y a la mejora de resultados de aprendizaje de los estudiantes. Lo anterior implica utilizar modelos basados en prácticas efectivas que incorporen el aprendizaje activo, la colaboración, y el asesoramiento y apoyo experto que permitan brindar una retroalimentación, a la vez que crear espacios de re- flexión pedagógica entre pares. Relevar la formación local Para este aprendizaje profesional que debe ser concebido como un continuo -y no como algo episódico- es trascendental relevar el contexto, los procesos de reflexión y poner en relieve el aprendizaje colaborativo. El conocimiento profesional surge cuando los docentes se enfrentan a ciertas demandas de aprendizaje por parte de los estudiantes y a partir de ello exploran, eva- lúan e incorporan nueva evidencia acorde a su contexto y al desafío local. Así, en la búsqueda de respuestas, se da origen a un nuevo conocimiento que les permite adaptar su práctica. A eso se refieren los “saberes docentes”, como se denomina nuestra organización anfitriona. Ese espacio es justamente el que consideramos importante relevar y promover. Se trata de ampliar la visión de cómo aprende el profesor: individualmente, entre pares, con un experto y en accio- nes formativas. Es imprescindible tener presente esta amplitud y variedad. Para ello, el gran desafío en términos de desarrollo profesional es la formación local, esto es aquella que ocurre en la escuela, aprovechando sus recursos humanos y materiales, y los lide- razgos de sus equipos. La formación local releva el trabajo colaborativo y la retroalimentación pedagógica y, para que funcione, necesitamos profesores motivados y comprometidos, un en- torno con las condiciones adecuadas, un equipo que los apoye y un líder que los inspire. En esa dirección, desde 2019, hemos estado avanzando en la elaboración de orientaciones digitales (disponibles en www.cpeip.cl/formacion-local) y en el despliegue de trabajo territorial mediante Comités Locales de Desarrollo Docente que permitan a los establecimientos aprove- char sus propios beneficios. Esto es aún más relevante dado el incremento del tiempo no lec - tivo que ha establecido la Ley 20.903. Lo que debiéramos resguardar es que cada docente en Chile cuente con un espacio de aprendizaje formal o informal, individual o entre pares, dentro

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