El mercurio : un discurso sobre la cultura 1958-1980

66 La idea de promoción aquí., está centrada más bien en la circula ción y extensión de productos o bienes culturales que "El Mercu rio" ha distinguido como promovibles. En general todos son pro ductos de alta cultura, salvo en especiales momentos en que sí reconoce y valora la necesidad de expresión del pueblo a través de la artesanía y el folklore. Pero, esta consideración que tu vo su importancia entre los años '65 y '71, no aparece en'el dis curso anterior ni posterior a esos años. 'Incluso, cuando apare ce, sólo constituye una especie de nota referencial y de aten­ ción especial, no inserta dentro de un discurso organizado y coherente. También, la idea de promoción y extensión cultural, es una idea permanente de "El Mercurio", por lo cual poco a poco va adjudi cándole un carácter primordial a la empresa privada, para ya en 1979-1980 hacerla el agente principal de esta promoción. Las universidades han ido perdiendo su primacía como agentes cu]_ turales. Las profundas transformaciones sociales han desvirtua­ do su carácter desde 1964 en adelante, y ya no pueden cumplir^ con su función esencial. Sin embargo, para pertenecer a esta cultura superior, la universidad y la formación universitaria mar ca definitivamente o No encontramos' en el discurso valoraciones extrauniversitarias, tanto a expresiones culturales, como a crea dores de la cultura y las artes. Como dijimos, la Universidad no puede, por ahora, cumplir su función. Entonces,' la empresa privada se incorpora a la promo­ ción cultural. Pero esta idea de hacer extensivos los produc - tos culturales, se Contrapone a aquella del uso restringido de los mismos. Sin embargo, al hablar de promoción, los productos que se promueven son los mismos que distinguen a esta cultura superior. Y ello puede significar, en términos de la hegemonía, que esta cultura desconoce otra producción cultural que no sea la propia, lo cual no resulta extraño en un discurso que, como hemos visto, no distingue productos ni creadores en otros secto res sociales. El discurso, en determinados momentos, pretende la promoción^de sus bienes culturales, e incluso es capaz de hacer un llamado abiertamente, como en el período post .'73, a los sectores disi­ dentes para incorporarse'a esta promoción. Pero, en el llamar

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=