Neoliberalismo, neodesarrollismo y socialismo bolivariano

9 el crecimiento económico, sin contemplar -con el mismo ahínco- de qué manera este crecimiento es distribuido en la población. En otro plano, el modelo ha buscado el incentivo al emprendimiento de los ciudadanos, apostando por políticas públicas focalizadas que fortalezcan los mecanismos para acelerar la creación y mantención de pequeñas y medianas empresas (PyME) en la población. Apertura al mercado externo, matriz productiva basada en la extracción y comercialización de materias primas, inversión público-privada. Respecto del neodesarrollismo en Brasil, algunos autores señalan que este -en su dimensión económica- se plantea llegar a equilibrios entre lo macro y lo microeconómico, promulgando tanto, la estabilidad de los macro indicadores económicos, como también, la promoción de la economía familiar y solidaria, en alianza con la gran empresa. En términos de mercado externo, la estrategia busca la inserción en el mercado global con productos de mayor valor agregado, fortaleciendo la industria nacional, estableciendo alianzas e inversión público-privada. En este aspecto, y con las debidas diferencias, el neoliberalismo en Chile y el neodesarrollismo en Brasil toman de buena manera e impulsan las directrices y los lineamientos que emanan de instituciones globales como el Banco Mundial, en dos dimensiones fundamentales: Estabilidad macroeconómica y reformas al mercado. No obstante, en la actualidad esta visión más clásica es complementada con un rol activo del Estado, pero no cualquier tipo de rol, sino que como agente integrador de estos lineamientos acordes a la etapa actual del capitalismo global. (BM, 2000: VI). Por el lado venezolano, se ha caracterizado en su ala económica por el impulso de empresas de producción social, primero desde un enfoque de desarrollo endógeno y luego desde la conformación de comunas socialistas. A su vez, la economía siguió siendo marcadamente dependiente de la producción y exportación de hidrocarburos, estableciendo alianzas geopolíticas con la OPEP y con una superpotencia como China. También, en el ámbito económico destaca el control por parte del gobierno del Banco Central, situación atípica en la región y que va en contra de los lineamientos trazados desde instituciones globales como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Respecto de las relaciones internacionales y de mecanismos de integración regional, los tres países bajo estudio implementaron políticas regionales coherentes con los modelos económicos arriba señalados. Durante el período de estudio (2005-2013), Brasil trabajó fuertemente en el MERCOSUR 3 , lo que queda de manifiesto en el primer discurso de asunción de Lula, el año 2003, donde plantea su revitalización. Mediante este tratado se busca integrar los países a través del libre comercio, pero además trabajar en un marco común de políticas sociales y productivas, entre las que se encuentra “… proveer a amplios sectores de la población del acceso a educación, salud, vivienda y servicios públicos de calidad, típicas del Estado 3 Mercado Común del Sur

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