Coloquio democracia y participación universitaria

Coloquio Democracia y Participación Universitaria [ 110 ] dió. El Consejo Superior pasó de ser un órgano legislativo a un órgano asesor. Los jefes departamentales desaparecieron y las autoridades de más bajo nivel comenzaron a ser designadas. Esta brutal intervención del poder político significó la pérdida total de auto- nomía. El poder se desplaza formal y efectivamente hacia afuera de la insti- tución, constituyendo nuevamente el rector una autoridad del tipo personal y político con una gran concentración del poder. El rol de la iglesia, por otra parte, no es hasta 1981 tan preponderante, aunque la UC sigue manteniendo su carácter católico y pontificio. 3 Esta etapa significó el puntapié inicial para configurar, ya en la siguiente etapa, una nueva forma de gobierno que marca- rá a la UC hasta el día de hoy. Y es que, aunque la etapa que comienza en 1981 está exenta de normativas creadas especialmente para universidades y sus formas de gobierno (salvo el DFL 1 que prohíbe triestamentalidad y cogobierno), las autoridades a cargo de las universidades se encargaron de posicionar sistemas de participación bastante similares a partir de un Proyecto de Estatuto propuesto por los mi- litares. En la UC, los estatutos son conformados ese mismo año con la firma del rector designado Jorge Swett y ellos rigen hasta el día de hoy nuestra uni- versidad. Dichos estatutos está basado en los DFL de esos años y establecen, como era costumbre, una concentración del poder bastante grande en el rector de la universidad, aún designado por la Santa Sede, y configuran un Consejo Superior que poco a poco comienza a hacerle contrapeso a la autoridad per- sonal del rector. Pero si algo dejan en claro el proyecto de estatutos es que los mecanismos de consulta y designación debían ser parte de la reglamentación, pues ven “en los procedimientos electorales democráticos para elegir autori- dades uno de los problemas centrales a superar” 4 . De allí que en 1993, basado en parte en esa normativa, la universidad establezca el sistema de comité de búsqueda para elegir al rector y en general a las autoridades de las facultades. Las relaciones de poder siguen, por tanto, ancladas a mecanismos de elección que configuran una universidad con una alta concentración del poder en la cima de la universidad, una baja participación de los actores universitarios, sistemas de elección más bien basados en la designación y una iglesia que, aunque presente, ya no ostenta el poder que anteriormente poseía. La historia intermedia entre los 90 y el presente la obviaré, no porque no haya habido avances en términos de cambios en la forma de gobierno de la UC en general (sería falso si así lo dijera), pero lo cierto es que la estructura sigue siendo la establecida en los estatutos de 1981, con todos los impedimentos que ello significa para reestructurar los mismos estatutos. ¿Cuáles serían entonces los elementos críticos que sirven para responder la pregunta por la localización del poder en la universidad? Bajo mi perspec- tiva, lo más importante está en analizar qué tipo de autoridades existen en la estructura (política, burocrática, personalista o colegial) y cuáles son las funciones que ellas detentan. La estructura de poder y, por lo tanto, el sistema de participación de una universidad tienen que ver, en gran medida, con estos tipos de autoridad, las funciones que ellas cumplen y las posiciones relativas que ellas ocupan en la universidad. 5 Un segundo elemento importante que ayuda a determinar dónde está el poder tiene que ver con analizar los distin- tos niveles en donde ese poder se encuentra. Un tercer elemento consiste en analizar quiénes, cuándo y dónde participan en estas estructuras de gobierno y, por último, la necesidad de analizar las relaciones de poder establecidas en los distintos niveles (partiendo por las cátedras y las mallas curriculares, 3 No hay clari- dad cuándo comenzó a ser pontificia, aunque según el Rector Castillo Velazco esta ha sido siempre pontificia. Sin embargo, en el nombre oficial de la universidad sólo figuró como pontificia después de 1973. 4 Cox. C. (1990). Formas de gobierno en la Educación Superior: nuevas perspectivas. Flacso, Chile. 5 Si nos dete- nemos, por ejemplo, en la UC, veremos que el tipo de autoridad que ocupa el Gran Canciller es en gran medida política, porque resguarda desde afuera que el camino de la universidad siga ciertos patrones con un poder que sobrepasa cualquier órgano colegiado.

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