Tres reformadores: Lutero - Descartes - Rousseau

TRES REPORMADORes 11 2.-León Bloy consideraba cada lugar co- mún del lenguaje vulgar como una esfinge re- costada sobre el misterio de la creación. Admi- rable medi"o de experimentar el éxtasis ·a cada enunciación de nuestro portero o de nue.5tro diputado. Los lugares comunes de ·la filosofía, aun en la historia de la filosofía, no encierran menos sabiduría oculta. ( Qué nos dicen ello• de Descartes) Como Lutero, la "Persona humana"; como Juan Jacobo la "Naturaleza y la Libertad", Des- cartes descubrió el "Pensamiento". "Reveló verdaderamente el pensamiento a sí mismo", escribía M. Hamelin (a). No nos indignemos, esta proposición es muy verdadera en el sentido en que la tomaba Ha- melin. Digamos que Descartes ha descubierto el rostro del monstruo que el idealismo moder- no adora bajo el nombre de "Pensamiento". (a) O. HameUn, .SI mt""'<l 4'J Deaottrlot, Parle, ..aloe16, 1911, 11t.c. ua.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=