Tres reformadores: Lutero - Descartes - Rousseau

11 UN DRAMA UPJ.RrruAl. 3.-Evocatlor vehemcmte de laa grandes fuerza, va¡as que dormitan en el corazón de la criatura carnal, Martín Lutero estaba dotado de una naturaleza realista y lírica a la vez, pode- rosa, impulsiva, valiente y dolorosa, sentimen- tal y morboaamente impresionable. Este hom- bre violento poseía bondad, generosidad, ternu- ra. Y junto a esto, un orgullo indomable, ttna vanidad petulante. El papel de la razón en él ern muy débil. Si se entiende por inteligencia la apti- t'ud para co¡er lo universal, J)ftra discernir la e.aencia de las cosas, para seguir d6cilmente las sinuosidade• y las delicadezas de lo real, no era inteligente, sino más bien limitado --obstina- do sobre todo-. Pero poaeía en un ¡rado ad- mirable la inteliaencia de lo particular y de lo práctico, una in¡cniosidad astuta y vivaz, la aptitud para advertir el mal en sus semejantes, el arte de encontrar mil expedientes _para salir de apuros y abrumar al adveraario, en resumen todoa los recursos de lo que loa fil6sofos llaman la cogitativa, le "raoon particular"

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