Desarrollo de la Antártica

EL MARCO GEOGRAFICO DEL DESARROLLO ANTARTICO Sergio Sepúlveda González Profesor del Departamento de Geografía de la Universidad de Chile El desarrollo geo:gráfico de un territorio responde a una concepción integradora y planificada del espacio tendiente a reconocerlo, pros– peclarlo, aprovecharlo en forma racional, vincularlo dinámicamente COn otras áreas, en definitiva organizarlo' adecuadamente para faci– litar la subsistencia de los grupos humanos y asegurar un alto ni– vel a su calidad de vida. Un modelo de desarrollo o un concepto de desarrollo de este orden necesariamente enfatizará una dimensión geográfica o espacial y analizará en una medida importante aquellas relaciones o flujos entre los hombres y su ambiente que se estimen como primordiales para caracterizar y explicar los niveles de exis– tencia alcanzadas en determinado territorio. El concepto es integra– dor, porque en función del media geográfico, apunta más allá del enfoque analítico/vertical, puramente econométrico, ,biológico, geo· lógico o psicológico para poner algunos casos y es ordenado, por– que admite la posibilidad de inducir el desarrollo, de planear los cambios y ofrecer alternativas y orientaciones acerca de la estructu– lación. y administración del espacio. El desarrollo geográfico representa también una respuesta, se po– dría decir apasionante, para territorios que constituyen un "anecú– mene" perfecto o están dominados absolutamente ,por la naturaleza como ocurre de una manera típica con el continente antártico o' con la Antártica Chilena. En efecto, por el insólito rigor de sus condi– ciones físicas extremas, el espacio polar meridional, plantea un de– safío específico de desarrollo que requiere la definición de un nue– vo esquema de colonización, de una nueva modalidad de implan– tación humana y de un visionario y consistente modelo de desarro– llo, que al parecer no tiene precedentes en la historia de la amplia– ción del ecumene terrestre. El desafío antártico, asume las caracterís– ticas de una empresa trascendental y casi excesiva especialmente en el caso de los países en vías de desarrollo que están presentes en el continente helado, puesto que deben asignar una cuota realmen~ te extraordinaria de sus recursos y energías de desarrollo para co– nocer y prospectar científicamente el territorio y consolidar una po– sición antártica, en competencia desigual con las grandes potencias