El medio ambiente en la minería

EL MEDIO AMBIENTE EN LA MINERIA 240 cuando existen numerosas definiciones de este concepto, una de las más simples es la que lo asocia al derecho de la generación actual para hacer uso de la naturaleza en su propio beneficio y desarrollo, pero sin comprometer el mismo derecho de las generaciones futuras. En términos estrictamente eco– nómicos, percibir los beneficios sin destruir el patrimonio -en este caso-Ia naturaleza. En el intertanto, los problemas que en un comienzo tenían dimensión local o regional, se' han ido transformando en globales. Los prol)lemas de la capa de ozono, del efecto invernadero, de la deforestación y la desertificación se han intensificado. l. LA DISTINTA PERCEPCION DEL PROBLEMA AMBIENTAL EN WS PAISES DESARROLLADOS Y EN LOS EN DESARROLLO El concepto de desarrollo sustentable, si bien ha permitido acercar posiciones en el mundo, tiene una percepción distinta según sea el grado de desarrollo del país de que se trate. Los países desarrollados, que han logrado satisfacer sus necesidades básicas relativas a los distintos fadores que conforman la calidad de vida (alimentación; salud, vivienda, vest.uario, educación, recrea– ción, etc.), lo perciben como una forma de hacer sustentable en el tiempo la calidad de vida alcanzada y están dispuestos a sacrificar en parte su ritmo de desarrollo con el propósito demejorar el factor calidad ambiental, cuyo intenso deterioro amaga la calidad int,~gral de vida que han logrado alcanzar. Distinto es el enfoque de los países sübdesarrollados, los que ven en este concepto fundamentalmente una manera de alcanzar grados de desarrollo que les permitan salir de su actual nivel de pobreza, que es la causa de sus principales problemas de contaminación, básicamente de tipo urbano. 11. LA REVOLUCION AMBIENTAL, FUENTE DE DESARROLLO TECNOLOGICO y DE OPORTUNIDADES DE NEGOCIOS Los problemas antes mencionado han sido los que han provocado la llamada revolución ambiental, que surge después de más de un siglo de la Revolución Industrial, como respuesta a un modelo de desarrollo que, si bien permitió importantes logros materiales a la humanidad -tal vez no repartidos con la equidad deseada-, ha dejado como saldo un planeta contaminado, un deterio– ro del patrimonio natural, que la presente y futuras generaciones deberán recuperar para que la naturaleza pueda seguir constituyendo un hábitat acep– table para el ser humano. Si bien es cierto que esta revolución ambiental implica costos para cada uno· de los actores sociales, no lo es menos que también conlleva los beneficios