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tas
maniobras
se
hicieron sobre la
marcha
y
pasndose
la pa
labra
en voz
baja
defira
en
fila.
La
noche
era
oscura en
estremo: serian las
dos de
la
manana
cuando
se
oy
la
voz
de
alto
pronunciada
con
tono
estentoreo. Los
que
no
conocian el
complot, creyendo
que
fuesen
los
enemigos,
trataron de
ponerse
en
defensa;
pro
en
el
acto fueron
sugetados
por
sus
companeros de fila
ini
ciados
en
la
conspiracion.
Carrera
sospech
tambin la
presencia
del
enemigo,
y
se
oy
su voz
\A
mi mis
chilenos! Entonces
se
vi
instanta
neamente
rodeado
por
algunos
indivduos,
entre los que
se
encontraban
los traidores
Moya
Inchaurte que
le
intimaron
rendicion
con
las
palabras:
*Est
V.\
preso,
entregue
las
ar
mas'
Carrera
resisti
y
disparo
dos
tiros
de
pistola
sobre los
agresores, pcro erro la
punteria
y
fu inmediatamente do
-
sarmado.
Todos
los
oficiales
cayeron
prisioneros
de
sus
mis-
mos
soldados,
esccptuando
el
coronel
Benavente
que
logro
cvadirse.
Los
gefes
de
los
amotinados
sin
perdida
do
tiempo,
des-
pacharon
un
chasque
con
el
.aviso
del
suceso
ai
gobernador
de
Mendoza,
y
otro
ai
coronel Gutierrez
en su
campamento.
En
seguida
se
pusieron
en
marcha
con
direccion
la
ciudad,
conduciendo Carrera atado
de
pies
y
manos.
Le intima
ron
silencio,
y que
si
proferia
una
sola
palabra
en
el
aeio
perderia
la
vida.
Temian
con
razon
el
ascendiente
de
su voz
sobre la
tropa.
A
instancias
de
Moya,
devorado
sin
duda por
el
re-
mordimiento de
su
infame
accin,
consgui
de
susasociados
1...,59,60,61,62,63,64,65,66,67,68 70,71,72,73,74,75,76,77,78,79,...88