Página 122 - Memoria sobre la Araucanía

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araucanos vendrn a formar una familia con la nuestra con un
misma relijion, unas mismas leyes, unas mismas costumbres:
i Chile se colmar de gloria cuando para ver nrilares de ciuda-
danos alistados a su pabellon tricolor haga uso cie su influencia
i recursos pacficos, pro poderosos para que la relijion que sus
padres le legaron junto con su independena i libertad, obre en
los ar.mcanos esa grande revohicion de ideas, i costumbres
que todo buen catlico, i todo chileno amante a su ptria
desea.
Veo que talvez se me pregunte ^cmo es cpie se encuentra
ahora tanta facilidad para convertir los araucanos, queseban
pintado como tan dificiles de ceder en sus costumbres, en su
indiferencia etc? jcomo se ha venido a despejar ese nebuloso
orizonte de que las misiones se presentaban circundadas? iqu
es lo que hace que esos hombres tan desconfiados, tan recelosos,
tan amantes de su independncia, i libertad en uri momento
cambien en confiados, i sumisos a las leyes, a las autoridades
dei pais? jporqu espcie de encantamiento se ha obrado es.a re
pentina revohicion ene! araucano, que se pesentaba sin siquie
ra prestar oido ala predicacion, sin raciocinar, ni reflexionar
en nada, siendo a todo indiferente, i'sin mas contesta cpie su
aylan, sin mas razon cpie el uso de sus padres, i de la tierra, i
sin mas esperanzas que aquellas vagas : deuma peayu, despues
lo veremos.
Despues de esponer los mdios que en mi pobre juicio, serian
los mas apropsito para remover las causas que estacionan las
misiones, i dejan infructiferas las tareas dei misionero, espero
satisfacer a estas dificultades, que preveo se me harn. Mas
mas desconfiados, i concebido mas receio con ocasion de las compras
estensas de terrenos, i los juicios odiosos que han sido su consecuen-
cia, esto se hace mas necesario. Por mui tranquilos que ellos estn, t
pacficos ai parecer, una embriaguez o un hombre mal intencionado
seria suficiente para conmoverlos, alarmai-los i empujarlosaun atentado.
En ese caso ya se v que esos establecimientos pueden sufrir, sino
ser destrudos, i los misioneros, librando bien, puestos enfuga, viendo
en un momento todo perdido.
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