Página 110 - Memoria sobre la Araucanía

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para la instruccion Cristiana, o si se habr de seguir el mto-
do contrario, que en la misma nacion de los llanos practica-
ban sus antiguos misioneros ; i venerando el ceio de Y. P.,
i deseo de mejor acierto en asunto tan importante, debo decir
en el asunto, que el dictmen que por ahora puedo dar a Y.
P., es el mismo que me movi a observar la referida prctica
entre los Pehuenches cuando hallndome de misionero apost-
lico en ese Colejio, fui destinado para conversor de esa nacion.
Halllo despues espreso en nuestro P. Benedicto XIYT en su
breve Postremo mensc, su data en Roma a 2 de febrero de 1747,
que se halla en su Bulario, pues atendida con reflexion la
mayor parte de su contestacion, parece no dejar la menor
duda, que por ningun acontecimiento dele cnferirse el sagrado
nbautismo a los infantes hijos de infieles, en cuya poteslad hayan
de quedar espuestos a graves peliyros de subversion: punto que
en la matria reputa este santsimo doctsimo pastor de la
Iglesia por de mucho momento, i que aun de que los tales
infantes sean hijos de brbaros bautizados, cuales sou la ma-
yor parte de nuestros indios, solo se da por lcita la colacion
del bautismo cuando haya prudente i probable esperanza de
que llegados a edad competente, pueden los tales bautizados
ser instrudos en los dogmas de nstra catlica relijion, o por
sus padres o por ministros evanjlicos, que puedan comda-
mente suplir la educacion paterna. Siendo esta declaracion
tan espresa i tan idntica ai asunto i no siendo posible que
wpuecla verificarse entre estos ndios la condicion que pide di-
cbo Breve para que pueda licitamente cnferirse el bautismo a
dos infantes hijos de brbaros bautizados; pues ni sus padres
son capaces de educados en la f i relijion Cristiana que no ob-
servan, ni menos instrudos en los mistrios que totalmente
wignoran, ni es posible que los ministros evanjlicos puedan
suplir commode ni aun incommode el descuido de sus padres, a
no ser que estos entreguei! en edad competente sus hijos a los
misioneros para la instruccion catequistica ; segun que la es-
wperiencia de mas de doscientos anos nos lo demuestra, parece
estar resuelto por dicho Sumo Pontfice el caso en cuestion.