Los Tratados celebrados entre la República de Chile y la Sociedad Mapuche

40 Carlos Contreras Painemal directamente por los gobiernos y discutidas éstas en sesiones abiertas y secretas por las respectivas cámaras. De esta forma, la sociedad mapuche se verá enfrentada a una guerra total contra las repúblicas, en la cual los parlamentos seguirán cumpliendo una función mediadora durante los siguientes setenta años. Entonces, el discurso de la inclusión estará presente en los albores de la República, en el periodo de euforia del triunfo de la revolución de la Independencia. Curiosamente, este discurso estaba por sobre lo que acontecía, porque en esos momentos los mapuche realizaban una guerra contra Chile, lo que Vicuña Mackenna denomina como el periodo de “la guerra a muerte”. Sin embargo, comienza al imponerse el nuevo paradigma, en el que el Estado declara “territorios baldíos” a lugares que estaban habitados por poblaciones mapuche. De esta manera, como veníamos señalando, los habitantes pasan a ser considerados como parte de otra especie o “raza inferior”, y, por tanto, carente de derechos. Igualmente, por el lado argentino se creó la imagen de territorio desierto, entendiéndose como deshabitado; sin embargo, esos territorios también estaban habitados por mapuche. En la realidad, el discurso de la inclusión, que emergió al principio, fue superado rápidamente, imponiéndose en concreto la exclusión.