Traumatología de la rodilla

Universidad de Chile Biomecánica de la rodilla Dr. Edgardo Neira Ramiro ORCID: 0000-0002-1434-9874 Introducción La biomecánica es una ciencia que estudio el efecto de la energía y las fuerzas en sistemas biológicos. Los fundamentos de la biomecánica se basan en la mecánica clásica, aplicando las tres leyes básicas de Newton: la ley de inercia que implica que un cuerpo cambia su estado de reposo solo si se le aplica una fuerza; la aceleración de un cuerpo es proporcional a la magnitud de la fuerza que se le aplique; y el principio de acción y reacción en que un objeto que ejerce una fuerza sobre un objeto, este recibe una fuerza de igual magnitud y dirección, pero en dirección opuesta. La Biomecánica consta de dos aspectos: la estática y la dinámica. La primera estudia los cuerpos en estado de equilibrio, por el contrario, la segunda se encarga del estudio del comportamiento de los cuerpos en movimiento o fuera de su estado de equilibrio. La dinámica describe los movimientos independientes de las fuerzas que intervienen en él (cinemática) o según la intervención de éstas (cinética). Si bien la rodilla puede ser divida en tres compartimientos, tibiofemoral, patelofemoral y tibiofbular proximal, es la interacción entre fémur, tibia y patela la que permite el complejo movimiento de la rodilla propiamente tal, siendo la tibiofbular proximal más importante en la cinemática del tobillo. La congruencia ósea es mayor en extensión, sin embargo, está lejos de ser tan congruente como en la cadera. El fémur tiene dos cóndilos asimétricos, siendo el cóndilo medial más largo (diámetro anteroposterior) y con una proyección más distal (línea articular es oblicua); mientras que el cóndilo lateral está orientado más anterior dado por la torsión interna del fémur, lo que ayuda a centrar la patela, hueso sesamoídeo que está en constante tensión hacia lateral por el valgo fsiológico del fémur, entre otras fuerzas. Así mismo, los platillos tibiales también son asimétricos, siendo el platillo medial cóncavo hacia la superfcie articular, mientras que el lateral es convexo. La osteología de la rodilla permite rango de movilidad en varios planos, pero al costo de requerir mayor soporte de los tejidos blandos de la rodilla. Es así como los meniscos permiten aumentar la superfcie de contacto en el compartimiento, así como el disipar fuerzas de compresión y son restrictores secundarios de la estabilidad anteroposterior y rotacional. La rodilla tiene 4 grandes complejos ligamentarias, en el centro de la rodilla tiene 2 ligamentos cruzados, también conocidos como pivote central, y las esquinas posterolaterales y posteromediales, los cuales juegan un rol importantísimo en la estabilidad de la articulación. Finalmente, los músculos alrededor de la rodilla – cuádriceps, isquiotibiales, gastrocnemios y poplíteo- son muy importantes para la estabilidad de la rodilla durante la marcha y otras actividades de la vida diaria. 55

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