La vivienda urbana en Chile durante la época hispana (Zona Central)

que produzca dinero para el costo que ha de tener la construcción de las (sic) puentes, en los parajes que se necesitan, no ha sido posible entender en esta obra..." Respecto del resto de las construcciones de la villa se senala que los edificios religiosos se en– cuentran en proceso de erección, realizándose las necesarias e imprescindibles actividades de culto de la población en templos interinos de reducidas pro– porciones y fábrica modesta. Es el caso de la iglesia parroquial y los templos de los conventos de Nuestra Sel'lora de la Merced y el del Colegio de la Companía deJesús, órdenes religiosasqueestánestrechamente ligadas a la fundación y origen de la villa. Poir su parte, el inrrueble destinado a cobijar la " .. sala que ha de ser de Cabildo, una Oficina de competente tamanoparaelEscribanode la Villa i la Cárcel ..." está perfectamente acabado y sus "... piezas son de buena enmaderación i estan cubiertas de teja..." Finaliza el citado informe sel'lalando "... Este es el estado que tiene hoi la población de la Villa, i, si he de formar concepto de lo queprometepara adelante, por la esperiencia que se ha tenido desde que se allanaron las dificultades de su principio, podré ase– gurar a V.E. que dentro de dos anos tendrá tanto aumentoque faltará terrenopara fabricar, aunque no con aquella suntuosidad en que hoi se vé la Capital de Santiago..." ( 1) Sin embargo, si bien no podemos afirmar que a partirde ese momento estuviese asegurado el futuro de la villa como lo afirma tan fehacientemente este observador del siglo XVIII , lo cierto es que la villa prosperó, aunque sin alcanzar una dinámica muy intensa, salvo el ir consolidando y completando la traza original e infraestructura básica, junto con el aumento sostenido de su población.Así,en un censo realizado en el al'lo 1747 contabiliza"... ciento trece familias las que tienen construidas sus casas ya de adobei teja, ya de tapiaypaja... " tres ariosmás tarde en el ano 1750, un nuevo censo especifica que"... existían cincuenta i seis familias mas que el número que arrojaba el levantado el ano 1747 ..." (2) Muestra del adelanto alcanzado por la villa. según pasaban los anos, lo constituye el hecho de que a solicitud de don Juan Francisco Javier del Canto, en representación del pueblo de SanFelipe el Real del Reino de Chile, se otorgaba el título de Ciudad a San Felipe el 1de abril de 1770, el cual "... ahora i de aquí en adelante el dicho pueblo de San Felipe el Real, se llame e intitule Ciudad de San Felipe el Real , que goce de las preeminencias, prerrogativas e inmunidades quepuede i debegozar por ser ciudad..." según lo estipula la Real Cédula firmada por Car1os 111 . (3) No es posible contar con planos documentales tantodel origen de lavilla como de sus primeros anos de vida durante el siglo XVIII , ya sea porque nunca existieron o por haberse ex1raviado en el transcurso del tiempo, de manera que el documento más anti– guo que da cuenta de forma planimétrica del estado y conformación urbana de la ciudad de San Felipe corresponde al plano realizado por el cartógrafo Nicanor Bolona, incluido en su obra "Album de Pla– nos de las principales ciudades y puertos de Chile". publicada en Santiago en 1896. A pesar del tiempo transcurrido, la planta de la ciudad, obviando ciertos elementos propios del siglo XIX,presenta un aspecto general muy cercano a lo que debe haber sido la población a fines del siglo XVI 11 , cuando presumiblemente alcanzó su total conformación, si– tuación que incluso no varió sustancialmente hasta mitad del siglo XX, manteniendo su carácter de ciudad pequena, de lento desarrollo y muyordenada. Destaca claramente el trazado original de 7 x 7 cuadras, enmarcado perimetralmente por cuatro amplias alamedas a que han dado origen, en el tiempo, las otrora cariadas y caminos reales. Hacia el norte y sur se ha producido el crecimiento de la ciudad que,cruzando las alamedas de Chacabuco y de las Delicias respectivamente, ha propagado la regular trama de damero una vez que el área central fueocupada,loquehabría sucedido presumiblemente iniciado el siglo XIX. En cambio ,tanto hacia el oriente como al poniente del núcleo original, las alamedas de Yungay y Maipú constituyen los bordes de la ciudad que limitan inmediatamente con i"l)Ortantes pro– piedades agrícolas suburbanas íntimamente ligadas al origen y funcionamiento de la población. A través de estas chacras, como se les denomina, una que otra calle o callejón se abre camino para comunicar la ciudad con los diferentes sectores de la región y otras localidades. (1) citado en JULIO AGUEROAG. "'Historia de San Felipe" San Felipe. lmprenUI "La Voz de Aconcagua··. 1902 pág. 21 (2) datos oontenidos en JULlOFIGUEROAG.. oln citada pág. 56 (3) citado en JULIO AGUEROA G., obra citada pág. 123 125