La intuición en la actuación

88 vida diaria. Como, por ejemplo: elegir la ropa de cada día, los alimen- tos que consumimos, el camino para llegar a casa, etc. Decisiones que, sin tener una explicación lógica, parecen ser las más certeras. Esto, en resumidas cuentas, podríamos vincularlo con el registro de experiencias que posee cada sujeto y los sentimientos que cada una de ellas le provoca, ya que cada persona toma decisiones de manera intuitiva según su propio vivir; y de esta forma las experiencias que vivimos serían determinantes en la configuración de nuestra manera de ser. Por alguna razón nos expresamos de cierta manera, nos gustan diferentes cosas y nos planteamos objetivos particulares. Muchas de nuestras determinaciones serían el resultado de un proceso por medio de la intuición. Ahora bien, dentro de la naturaleza existen ciertos principios que podrían ayudarnos a dilucidar desde dónde viene la intuición, y de qué manera se conforma aquella certeza que sentimos a la hora de tomar decisiones. Los organismos vivos siempre apuestan a un prin- cipio básico de supervivencia donde desean mantener su integridad, de esta forma existen reacciones intuitivas que estarían garantizando un equilibrio armónico a nivel de composición celular. El equilibrio, sería aquel estado que propone el medio para garantizar la armonía de cada organismo; por ejemplo, una planta que busca el sol se movi- liza a través de sus canales perceptivos para cambiar la dirección del crecimiento de su tallo, encontrando la luz y la energía que necesita. De la misma forma, el ser humano —que también es organismo vivo— siempre apuesta a un principio de adaptabilidad al medio conocido como principio de homeostasis, el cual ocurre a nivel celular y está en la constante búsqueda del equilibrio entre el medio interno y externo del ser vivo. Este proceso de adaptación del que hablamos, también podemos considerarlo dentro de nuestra toma de decisiones, ya que el ser humano busca relaciones y acciones que mantengan equilibra- do su estado anímico y emocional. Lo anterior podemos relacionarlo con la llamada homeostasis psicológica, término introducido porW.B.

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