Salud popular desde la mirada de líderes comunitarios: visiones y experiencias

68 un daño irreparable, dejando con una gran carga a las futuras generaciones, ante su actuar negligente hoy es deber de las autoridades legislar y actuar cuidando los intereses de la humanidad, poniéndose de una vez por todas del lado de la gente y ya no más de los empresarios. Finalmente, dado el contexto de lucha social actual, hacemos un llamado a una nueva Constitución, donde la salud esté realmente garantizada como derecho, donde se acabe la dualidad: la salud para pobres y la salud para ricos, existiendo un sistema único de salud, de carácter público y de calidad. ¿Qué esperamos de las instituciones formadoras de los equipos de salud? Debemos conocernos: comunidad, dirigentes, estudian- tes y académicos. Reconocer las experiencias de los acto- res de la comunidad, el proceso de formación de estu- diantes y la experiencia y rol de la academia. Los cursos de formación de los estudiantes podrían vincular diri- gentes sociales. Debemos reconocernos como personas “ Cambiar el lenguaje; mi nana, mi secretaria, mi dirigente” y “evitar la palabra yo yo yo” , es decir la auto referencia y el egocentrismo en el trabajo. Esto no va en contra de aprender, y es más podría fortalecer la habilidad de huma- nizar la atención en la salud. Que las universidades apoyen a los jóvenes para que se conecten con la comunidad, que les exijan a sus estu- diantes y cuerpo académico vincularse con el trabajo comunitario más allá de una nota, “que se pongan los pantalones con el compromiso que tienen con la comu- nidad y que se genere un real trabajo en las escuelas, en las poblaciones” . Del mismo modo, es un espacio importante para aprender un trato respetuoso y digno a cada persona. Eliminar toda práctica de acoso, abuso y violencia en salud, desde todos los integrantes de la comunidad. No se requiere apos- tar a que todos y todas las estudiantes se formen y reci- ban todo de la misma manera, pero esa es una habilidad mínima que deben trabajar en el curso y en su formación. Otra habilidad importante a aprender estrategias de con- vocatoria con la comunidad. Como difundir y establecer alianzas con la comunidad, los y las Dirigentes sociales en salud son esenciales en los procesos de convocato- ria y trabajo con la comunidad. Esto no depende solo de los estudiantes, también influye los proceso de tutores y centros formadores para apoyar. El trabajo con la comu- nidad debe ser acompañado para un proceso formativo adecuado (con tiempos adecuados), si no se puede gene- rar mucha frustración en todas partes. Se requiere un proceso de consenso sobre expectativas y necesidades.