Silvicultura en bosques nativos: experiencias en silvicultura y restauración en Chile, Argentina y el oeste de Estados Unidos

Conclusiones y desafíos — 259 aquellas que deben ser sometidas a restauración, re- quieren un mayor esfuerzo de investigación y tienen como eje común la necesidad de fortalecer las pres- cripciones para la silvicultura de la regeneración, un aspecto fundamental para aumentar la resiliencia y la sostenibilidad de los bosques en el largo plazo, y en diferentes escalas temporales y espaciales. En consecuencia, es urgente tomar medidas para mo- tivar la investigación en silvicultura, así como para incrementar su implementación en terreno median- te la educación y la extensión de resultados sobre técnicas que permitan, en primer lugar, regenerar los bosques nativos ya sea para sostener su produc- ción o para restaurar aquellos degradados. El presente libro muestra que la restauración de bosques degradados ha tomado una importancia creciente en las ciencias forestales. La restauración forestal se debe sostener fundamentalmente en el conocimiento de la ecología, la dinámica de los eco- sistemas a restaurar y en las aplicaciones en terreno de este conocimiento, para reubicar a los bosques en una senda de desarrollo al menos similar a aquella naturalmente esperada en dichos ecosistemas. Esta es la ecología de la restauración, es decir la práctica de la restauración ecológica. De esta manera, no se puede separar la ecología de la restauración de la silvicultura, ya que ambas se sustentan fuertemente en recuperar la capacidad de regeneración de los bosques y en eso la ciencia de la silvicultura lleva siglos, mientras que la de restauración sólo décadas. Entonces, las actividades de ecología de la restaura- ción deberían incorporar el conocimiento ecológico y silvicultural necesario para recuperar estos proce- sos claves de los bosques (por ejemplo la regenera- ción natural). La silvicultura entonces es la manera práctica de llevar a cabo muchas teorías ecológicas y es la columna vertebral de las actividades de manejo y de restauración. Lo que se hace a nivel del árbol, del rodal, del paisaje y su ordenamiento en el terri- torio tiene que ver con la silvicultura que se realiza en los bosques, rodal a rodal, lo que es fundamental para aumentar el bienestar social y la funcionalidad de los ecosistemas. Se requieren esfuerzos multisectoriales y mul- tidisciplinarios para implementar a gran escala tanto el manejo como la recuperación de bosques degradados, millones de hectáreas en cada caso. Sólo de esta forma se revertirá el proceso de pérdi- da de bienes, servicios, mercados y valores de los bosques nativos. Revertir la situación actual además permitiría entrar en un escenario de balance posi- tivo donde haya mayor dedicación al manejo que a la restauración, y haya más paisajes de bosques manejados y bien conservados que de paisajes de- gradados. Este esfuerzo requiere: 1) más y mejor educación forestal en ecología y silvicultura de los bosques nativos, formal, informal y de modo con- tinua; 2) mejoramiento gradual de los mercados de maderas nativas, de modo que la intensidad de las intervenciones en los bosques pueda ser menor para generar un mismo ingreso; 3) instituciones foresta- les públicas promoviendo investigaciones prácticas de largo plazo para el manejo forestal sostenible, y generando facilidades (incluyendo subsidios) para incrementar la superficie de bosques manejados y restaurados, y 4) fortalecimiento y modernización de políticas forestales, con un enfoque en cumplir efectivamente los compromisos adquiridos en tra- tados internacionales sobre conservación de la bio- diversidad, mitigación del cambio climático y en ge- neral sobre manejo forestal sostenible. Este conjunto de esfuerzos, en donde deben participar diversos actores, deberían aportar a una mejor gobernabili- dad de los bosques nativos. Entre estos actores esta- mos los ecólogos y silvicultores en bosques nativos, como los autores de este libro, cuyo rol fundamental es contribuir a incrementar la aplicación en el terri- torio del manejo forestal sostenible, y ello significa promover también los esfuerzos conducentes a que los propietarios vean las ventajas económicas, socia- les y ambientales de este manejo. Además de todo lo anterior, en el caso particular de la investigación en silvicultura y ciencias asocia- das, creemos que subsisten varios desafíos para me- jorar la comunicación entre investigadores y diver- sos actores de la sociedad. Estos desafíos incluyen: