La Quinta Normal i sus establecimientos agronómicos y científicos : paseo de estudio

-145- da la hipótesis de profundos vacíos subterráneos bastante vastos i numerosos para dar cabida a hundimientos tan frecuentes 'como son los terremotos. . J?or otra parte, es posible el descenso lento por efecto del peso de las .masas, pero es imposible el hundimiento instantáneo de picos de 2,623 piés de elevacion, como el Krakatoa, sin que l~s remuevan i arranquen de sus qui– cio.s fuerzas estrañas poderosísimas. Es por esto que los fenómenos del terremoto de Krakatoa han dado mayores grados de probabilidad a la teoría de Buch i Humbold que dan por causa de los terremotos las conmocwnes del fi¿ego central. II Fuerzas volcánicas En efecto, los fenómenos todos del terremoto de Kra– katoa han puesto en crédito aquella teoría, pqrque es im– posible imajinar que la violenta ola interior que atravesó en un momento mas de 600 millas de cadenas de monta- · ñas desde el foco submarino de Keeling Atoll hasta Bata- · via i que formó i lanzó con poder titánico dos grandes olas esteriores, una marina i otra atmosférica, hayan teni– do otra causa que fuerz~s volcánicas en violenta actividad. Esas olas, segun lo atestigua el capitan de la «Juniata», atravesaron en su movimiento los antípodas de Kraka– toa i volvieron al lugar de donde habían partido. Cua– tro veces dieron vuelta al rededor de la tierra ántes que se restableciese el equilibrio de los mares, empleando solo dos horas ocho minutos en trasportarse de San Petesbur– go a Valencia. Está ademas comprobado por capitanes de buques, tes·– tigos' de la catástrofe·, que la ?rupcion volcánica del cráter submarino de Keeling Atoll fué la que arrojó á. la super- - 19