La producción de música popular en Chile

es puerta abierta para difundir la música de buen nivel. 2. Sergio Pirincho Cárcamo Habría que aclarar algunos conceptos desde el comienzo. De partida, aunque nacieron las emisoras con un precepto básico que era difundir cultura, entretención e informa­ ción, creo que de una u otra forma ese triple precepto no se cumple en estos tiempos; y empresas con fines de lucro sujetas a ratings, donde las voluntades, a veces, son quebradas precisamente por el resultado de una en­ cuesta de los auspiciadores y por la mantención de una empresa comercial con fines de lucro. Bajo este aspecto se sacrifican muchas cosas. Hay que dejar bien en claro esto porque hay mucha gente, a veces, tiene la buena in­ tención de difundir lo nuestro y no puede llevarlo a buen término debido a que una encuesta marcó que ese es­ pacio no tenía los miles de auditores que era necesario para que se justificara competitivamente seguir. El otro aspecto que creo es fundamental, sería definir algo que no vamos a poder definir nunca: cuál es la mú­ sica popular chilena. Y, en eso podríamos estar discu­ tiendo toda la tarde: ¿es el rock chileno?, ¿es el can­ to nuevo?, ¿es la nueva canción chilena?, ¿es el folklo­ re puro?, ¿es la cumbia?, ¿es el tango?, ¿es el vals peruano?, ¿o es la música popular chilena?. Habría que definirla para aclararnos un poco.

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