La industria cinematográfica en Chile : limites y posibilidades de su demogratización

na capacidad de proyección en la historia si sólo se apo­ ya en condiciones político-estatales favorables), se esta formando las bases de autonomía de un campo. Asimismo, se reconoce que existen regulaciones jurídico es tatal.es que son necesarias para permitir el 'despegue.' real de este proyecto. La existencia de organizaciones gremia­ les de los .profesionales del cine, de grupos preparando bo rradores de proyectos de ley» etc. manifiestan un alto ni­ vel de conciencia respecto a los cuellos de botella del cam po, y de compromiso por una lucha efectiva para presionar por políticas más favorables. Ellas no buscan reeditar pro teccionismos estatales ni centralidad del estado en la pro­ moción del cine; más bien, se apela a condiciones tributa­ rias para la producción, de derecho a pantalla para la exhi bición tanto de cine como de t v , de un más adecuado porcen­ taje de ingreso para el productor en relación al distribuí dor-exhibidor y al estado (en tanto se reserva parte de los ingresos da la taquilla vía impuestos), de la formación de convenios que favorezcan las coproducciones y la formación de un mercado regional Latinoamericano o iberoamericano,etc. Por cierto, no se trata sólo de regulaciones de mercado. Es tá claro que sin modificaciones a la censura expresiva, a la libertad de filmación, reunión y exhibición, sin que se produzca una recuperación emocional, intelectual y sensiti va a través del debate y la confrontación producida entre las producciones mismas y sus realizadores, sin la más fluida entrada de los cineastas en el exilio y de sus produc clones, toda medica administrativa en los otros planes que dará coja> Por otr parte, una apertura político-cultural permitirá quizás reintegrar opciones que hoy se tienden a institucio nalizar, en algunos campos, como antagónicas*. • Una tendencia, la de pensar como proyecto utópico la pro­ ducción* competitiva en el mercado cinematográfico comereial, que pueda llegar y gustar al "gran público", al cual le sea