Palabra Pública N°28 2023 - Universidad de Chile

cine lo lleva a crear una alegoría social sobre la fe, los sectores populares y la compasión, en Brujería hace algo similar en torno a la razón colonial y los pueblos originarios desde la perspectiva de la marginación colonial. Como en otras películas recientes — Blanco en blanco (2019), Rey (2017)—, Brujería echa mano a la recons- trucción histórica para establecer una interpretación en torno a los procesos históricos y la cuestión colonial. A partir del caso de la Recta Provincia, el filme propone una relectura en clave alegórica sobre la imposible convivencia entre dos mundos: el de la razón y sus límites; el mundo de la cultura blanca, colonial y occidental, y el de las cul- turas originarias, más vinculadas al pensamiento mágico y a la resistencia frente a los códigos con los que los blancos intentan asimilarlos o dominarlos, encarnada aquí en el brujo huilliche. Este aspecto denota una cierta curiosi- dad o nota antropológica respecto de esas otras formas de comprender la relación humano/naturaleza, otorgándoles a sus elementos cuotas de fuerza y conexión cósmica. En ese marco, la película se convierte en una fábula ilustrativa de los límites de la razón colonial moder- na. Mientras Rosa parece ser un personaje mediador entre ambos mundos, son los propios acontecimientos los que cierran las puertas a esa posibilidad: luego de pedirle que salve la vida del bebé del alcalde, la niña es traicionada cuando se decide condenar a los brujos. Rosa se venga a través de los perros y después la vemos IVÁN PINTO Crítico de cine, investigador y docente. Editor de la revista La Fuga.cl. Investigador posdoctoral en FCEI, Universidad de Chile. « Brujería es otra muestra de los esfuerzos del cine chileno en su fase internacionalista por dar cuenta de problemáticas sociales, particularmente interrogando las historias de la nación y sus “otros”». reunida con otros brujos. De esta manera, el filme pre- senta también la capacidad de agencia de esta comuni- dad para mantener su autonomía respecto de la cultura opresora y sobrevivir bajo las sombras de su dominio, utilizando sus poderes a su favor. Brujería es otra muestra de los esfuerzos del cine chi- leno en su fase internacionalista por dar cuenta de proble- máticas sociales, particularmente interrogando las histo- rias de la nación y sus “otros”. Como ha pasado antes en algunas películas, se repite algo del estereotipo y el rasgo aún demasiado binario entre lo que sería la cultura blanca y su otredad, idealizando identidades con un sesgo pa- ternalista (algo que aquejaba también a El Cristo ciego ). Mientras podría considerarse un acierto la lectura de la historia de la Recta Provincia, sus mecanismos de repre- sentación acusan cierto estilo arty para un thriller que se regodea demasiado en la atmósfera, otorgando sentidos no siempre evidentes o abiertamente difusos, a medio camino entre un cine de narración y otro de vocación autoral. Aunque se aleja del “realismo mágico” al estilo del tratamiento en … Y de pronto el amanecer (2017), de Silvio Caiozzi, cabe preguntarse cuánto queda hoy de las dicotomías instaladas por ese género literario. Brujería Alemania, Chile, México, 2022 100 minutos Dirección: Christopher Murray Guion: Christopher Murray y Pablo Paredes Elenco: Valentina Veliz Caileo, Daniel Antivilo, Sebastian Hülk, Daniel Muñoz Productora: Fábula

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=