Publicaciones infantiles y revistas de historietas en Chile : 1895-1973

51 subjetiva, parcial, mínima» Se hace primar así extremadamente lo subjetivo sobre lo objetivo. Cuando la historieta se centra en la acción individual, se oculta la realidad social, y apare­ ce como si un hombre hiciera la historia y no el conjunto de los hombres'. Esto simplifica enormemente el carácter de los espa­ cios sociales representados. El Africa de Tarzán es simplemen­ te un lugar exótico, lleno-de peligros y aventuras, libre délas contradicciones sociales (y cuando las hay, son solucionables o por la dialéctica ley/violencia o por obra de Tarzán)» Por otro lado, esta legitimación de los valores individualistas implica un mecanismo narcisista que lleva al lector a sobrevalorarse, lo cual de partida implica una disminución" del ser humano contiguo, con el cual debería establecerse una interrelación social dife­ rente, sin intentar dominarlo o guiarlo; mediante diferentes mé­ todos . Así, la historieta contiene seres que se dividen en comunes y co rrientes, por un lado, y superiores y mesiánicos por otro. Estos super seres son enviados por un dios, partícipes de una leyenda, tienen origen sobrenatural, se ven como salvadores de la humani­ dad y ultrapoderosos, con habilidades y cualidades completamente fuera de lo cotidiano. Frente a esto, hay unos seres inferiores, pasivos, oscuros, indefinidos, imitadores, carentes de humanidad y atractivo, casi siempre obedientes. Otro rasgo destacable en la estructura ideológica de la histo­ rieta en Chile hasta 1970 es la presencia constante de relacio­ nes verticales de dominio. El Pájaro Loco domina a Piquin y Cq col, sus sobrinos; el Llanero Solitario a Toro (es decir, a los indígenas asimilados al sistema social de los blancos); Batman a Robin; Super Ratón a los demás ratones; Betty a "Pedro Picapie dra; Daisy a Donald; el Conejo Bugs a Elmer Gruñón»- Los domina dos pileden ser incluso .animales, que sin -embargo con su conduc­ ta ejemplifican algún' sector social. Superman domina a su pe­ rro Krypton y Tarzán a la mona Chita. Las relaciones interper­ sonales en la historieta nunca son igualitarias, horizontales, democráticas» Siempre hay un ser sobre otro. Arriba de los mi iPonarios, Me Pato; arriba de los suertudos (la suerte, otra lógica irracional, como el azar, el destino, etc.), Glad Consuer te; arriba de'los genios, Giro Sintornillos (también llamado Gi ro Peraloca) ; arriba ;de Tos perdedores, Donald. E.stas relacio­ nes de dominio siempre legitiman relaciones de bloques de poder. Una relación de dominio en el plano social del amor es el machis mo, también.abundantemente documentable en la historieta: esto es lo queshace Superman con Luisa Lane o Tarzán con Jane o Man­ drake con Narda.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=