Diario de un joven norte-americano detenido en Chile: durante el período revolucionario de 1817 a 1819

- 117 - La presente estacitjn cs la peor del aflo e n pastos, y asi 10scaballos s e -\-enescuali- (10s y enflaqueciclos. CiiCiitase sicnipre con la primavera, que coniienza en cl mes pr6- sinio, para que puedan reponcrse y cngor- darse. Establos 110 se conocci~, iii el lieiio s e guarda, dcjando que el pasto que tapiza sus fkrtiles campinas niadure y sc piidra s in que nadie sc di: el trabajo de cogcrlo. Suplen el escaso forrajc de 10s nieses cle in-\-icrno (6 niejor dicho, de 10s del otoho) con la paja del trigo iiiczclada con granos. I I ~ \-isto en el campo niultitud de caballos con las orcjas cortadas 6 quemadas p t a p - dns, coli lo que yuedan asi completanicnte sordos, prhctica cuyas yentajas no rnc ex- plico. La cola sc les deja siempre arrastrar por el suelo. Un hernioso caballo b a ~ o que nic regal0 don Antonio Sosa anda perclido liace inas de tin mes y no dudo que lo liayan cogido 10s soldados que han es- taclo prorrateando aniinales durante alg<iii tienipo en csta parte de la pro-\-incia. La ultima seniana me hall6 en una cle las d i ~ws i one s corrieiites en esta c'yoca del afio llainadas rifas, que ze yerifican del

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