La novela chilena : 1974-1984

60 tiempo. Benjamín se debate entre dos linajes, su apellido Cruz y por tanto su tendencia al desorden, al caos, o su se gundo apellido Littleford, marcado por el asesinato y lá pa rálisis. El origen poluto se concreta en el sable del abue lo, el cual Benjamín hereda y utilizará durante el momento de la venganza y la ignominia, al final de la novela. La lucha por el poder para controlar la realidad del otro se da entre Benjamín y su madre, Beatriz, Benjamín quiere acabar con el linaje maldito,': de manera casi inconsciente, revelando semipublicamente la verdadera historia;de su lina je. Pera ello recurre al juego de los mimos,-a la represen taci6n. Teatro dentro de la novela, donde se muestra la verdad mediante la ficción. La presencia del abuelo Little ford confirma a Benjamín, quien cree que el asesinato del pasado fue un simple ensayo y que la verdadera consumación, el apocalipsis, solo acontecerá'ahora, en escena, donde la ficción se hará una con la realidad. Una sensación de no transcurso llena el espacio. La lucha entre Benjamín y Beatriz por controlar e interpretar la rea lidad se simboliza en el conflicto entre la luz (Beatriz) y la sombra (Benjamín), y entre el primer piso de la casa (más social, de Beatriz), y los corredores del segundo piso (pertenecientes a Benjamín y su silla de ruedas). El humo ayuda al claroscuro, el alcohol encegece aún más (las 50. bo tellas de whisky), el adulterio de Rosario con Tito es par­ te de la trama tejida por Benjamín. Hasta el final, según Benjamín, Beatriz quiere ocultar la .historia de su linaje culpable. A medida^ que el momento decisivo se acerca para Beatriz y Benjamín, éste se va excitando sexualmente cada vez más. El "trágico sino filial" se realiza otra v.ez en toda su magnitud. Dice Benjamín, el narrador, sintetizando lo que ve: "madre despreciada por el hijo; una mujer aban­ donada por el marido; una hija despreciada por el padre". Su madre, el pasado', definida como madre, esposa e.hija, es condenada por los hombres. Un signo de ambigüedad se posa frente a las acciones finales de Benjamín. Al enfrentarse, en el centro del escenario con s u “madre, ¿se revelaba contra el destino o lo cumplía? ¿Eli­ minaba Benjamín el estigma o lo reproducía una vez más? Bea triz simplemente borra los difíciles ‘trances 'de su vida; Be"ñ jamín quiere en cambio cerrar de una vez por todas su propia