La novela chilena : 1974-1984

58 Todavía, de León, como su nombre lo revela, se refiere al proceso de influencia á lo largo de toda una vida de una mu jer-, Carmen, sobre el narrador autobiográfico, Carlos. Nue vamente se intenta recuperar una experiencia vital ubicada en el pasado, en la juventud del narrador y protagonista. La historia cubierta, a veces con extremas condensaciones temporales, va desde 1914 hasta 1977„ Para Carlos'-, el narra dor protagonista, la mujer, como la literatura-, es parte de la iniciación. Después del acercamiento a Carmen viene “sin embargo la expulsión de' este paraíso, Carmen sigue después ot-ro camina y muere posteriormente, pero siempre seguirá ac­ tuando en la vida de Carlos, como nutriente, como dadora de identidad. En esa adolescencia perdida se hizo pues un ma­ trimonio indisoluble, que ahora se actualiza mediante la evo cación. La casa de los espíritus, la celebrada novela de Isabel. Allende^es una saga, la cronología de una estirpe. Se suce den así diferentes generaciones de diferentes grupos socia­ les, en particular del grupo aristocrático dominante y de los campesinos, es decir, los del'Valle- y los García. El poder en este universo está representado por Esteban, que impone su dominio violenta y autoritariamente sobre las cam pesinas del fundo. Se extiende así su sangre también entre los subalternos. Este acto marcará la historia, porque su violencia será devuelta a la familia del Valle cuando un miembro de la familia García detenga y torture a Alba. La novela cubre desde la primera década de este siglo hasta el período post 1973. El conflicto nace del choque entre diferentes estratos sociales marcados por la violencia-de los dominantes y acontece en un escenario fuertemente con - textualízado, pleno de referencias históricas generales. En el grupo aristocrático, aparte dé Esteban, están las mu­ jeres, Nivea, Rosa, Clara, Blanca, Alba,Ntodas ellas muje - res de acción, poseedoras de un poder mental sobre la -reali dad y grandes experimentadoras del amor como pasión corpo - ral. Ellas y su espacio, es decir, la' casa, están habita - das por los espíritus, por las voces del pasado. -Ese pasa­ do violento instaurado por Esteban actúa determinantemente en el presente, el cual podría ser superado por una mujer, Alba, la última de la genealogía, mediante la hija que va a nacer y que puede ser tanto hija de Miguel, miembro de la resistencia, o de las violaciones que ella sufrió en prisión. Hay en ella pues la semilla de un futuro.

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