Juventudes en Chile. Miradas de jóvenes que investigan
El consumo simbólico en personas jóvenes y su pertenencia a los grupos de status – 293 “yo le cuento a mi mamá de mis congresos, de los temas que son, a dónde voy […] Pero de todas formas, honestamente, igual a veces me quedo con la duda de si real- mente cuando yo le digo algo y le explico de qué se trata, como que no sé si al final… no sé si las dos nos conectamos en eso de entender lo duro que fue […]. Siempre como que quedo un poco con la duda si acaso me habrá entendido como en tér- minos como profundos”. (Sandra, 31 años, doctora © en educación, y profesora de lenguaje). Bajo este perfil, los padres se constituyen como personas que deben ser “guiados”, para lograr hacer de sus vidas lo más provechosas posible. Sin las herramientas so- ciales necesarias para hacer de sus vidas un proyecto que mire hacia la satisfacción o la realización personal, ocurre una desvalorización del juicio de los padres, el que se considera como enquistado por las propias limitaciones del estrato socioeconómico en el cual se mueven, y que por tanto, requiere de asistencia. El o la joven ofrecen gestionar aspectos de la vida familiar para el bien común, argumentando implícitamente que los padres no tienen las facultades sociales para decidir qué es lo mejor para sí, por la falta de su capital cultural. Por último, los padres como sinónimo de un medio sociocultural que resulta conocido en su sistema de significación, se refiere a la representación de la familia como un seno acogedor que da a los y las jóvenes la sensación de un hogar cálido, construido por años de pertenencia, y que no requiere los esfuerzos constantes de emplear estrategias de posicionamiento social. La expresión de un universo simbó- lico que resulta familiar y que otorga seguridad emocional y humana, producto de las certezas establecidas: “Y la otra cosa que también extrañaba… no sé por qué extrañaba como llegar a la casa y tomar once con pan con palta. O sentarse a ver una serie como tonta… no sé”. (Sandra, 31 años, doctora © en educación, y profesora de lenguaje). Existen también ciertas diferencias que si bien no se relacionan específicamente con la familia, tienen incidencia en la manera en la cual los y las jóvenes viven sus rela- ciones interpersonales. Como ya vimos, las raíces socioculturales –al provenir del trasfondo familiar–, son un elemento emocional muy potente en la vida de los y las jóvenes de primera generación universitaria, tanto por la analogía como por el con- traste que les permite ejercer sobre su propia realidad actual, evaluando su conexión con el estrato social popular. El grupo que es más similar a las clases bajas son los funcionarios no profesiona- les que desempeñan labores no calificadas en los entornos de trabajo de las personas
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=