Juventudes en Chile. Miradas de jóvenes que investigan

Jóvenes y cotidianidad: consumo, infracción, ocio y tiempo libre – 257 cotidianidad de jóvenes en situación de infracción de ley con consumo problemáti- co de drogas. 1.3. Consumo de drogas e infracción de Ley El uso de drogas ha estado presente en nuestra historia desde tiempos remotos con usos mágicos, místicos, religiosos, medicinales y recreativos, en búsqueda de placer y/o para evadir la realidad (Escohotado, 1998). En la actualidad el consumo de dro- gas muestra una amplia diversidad tanto en los tipos de drogas existentes, alucinóge- nos, estimulantes, opioides y depresores, (ops, 2009), como en sus usos: medicina- les, terapéuticos y recreativos, entre otros. Con respecto a la problemática del uso y abuso de drogas en el mundo, no deja de ser alta la proporción de personas consumi- doras. El “Informe Mundial sobre las Drogas 2010” elaborado por la Oficina contra la Droga y el Delito de las Naciones Unidas, (onudd, 2010) señala que entre 155 y 250 millones de personas en todo el mundo (3,5 a 5,7% de la población entre 15 y 64 años de edad) consumieron sustancias ilícitas en 2008 y que la marihuana continúa siendo la droga que más se usa en el mundo (entre 129 y 190 millones de personas). En Chile, durante los últimos diez años se han realizado diversos estudios comparativos en relación a la ingesta de drogas lícitas e ilícitas, haciendo alusión a aumento y disminución del consumo en distintos períodos (Fuentealba, Cumsille, Araneda &Molina, 2000; Senda, 2010; Senda 2013). La disminución podría asociar- se al establecimiento y consolidación de políticas públicas de Estado en prevención y tratamiento, desde el control y la normativa social, como la implementación de la Ley de Responsabilidad Penal Juvenil (Biblioteca del Congreso Nacional, 2005), menor disponibilidad de drogas en el país, un incremento del precio de la cocaína y pasta base y una disminución en la percepción de tráfico y consumo de sustancias dentro del sector en el que se habita. Por su parte los aumentos podrían estar dando cuenta de que estamos en presencia de una sociedad de consumo en donde cada vez más el abuso de sustancias se hace parte del cotidiano en el que nos encontramos inmersos; la percepción de riesgo y problema en torno al uso y abuso de sustancias tanto lícitas como ilícitas, son parte de situaciones que no se cuestionan dentro de nuestra sociedad capitalista, sino que cada vez más se establecen normativas desde la lógica del control social, impidiendo la reflexión y análisis de éstas. En nuestro país, desde la perspectiva de las políticas gubernamentales orienta- das a enfrentar el consumo problemático y/o dependencia de drogas, se han desa- rrollado una serie de programas para tratar el tema, en donde cada vez más se asocia el consumo de drogas con la infracción de ley, tanto en el caso de jóvenes como de adultos. Se han implementado programas de prevención, tratamiento y rehabilita- ción para niños, niñas, jóvenes, mujeres, hombres y personas con patología dual. El propósito fundamental de estos, es concientizar a la población sobre los efectos

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