Cultura y recoleccion folklorica

nómeno folklórico tiene otra connotación, Quizás si ese persona tran£ plantada que llegó a ese medio posiblemente lo que elle portaba — por­ que ella es un portador de un fenómeno local— iba a ser o no útil o funcional para esa comunidad o la que re tuvo que integrar. Yo el problema lo vería desde otro aspecto, es decir, como esté su pr£ ceso de áculturación, qué pasa con esos ''alores, eses conocimientos que esa:-persona trae; qué cosas aportan a la comunidad, es un punto de vista» No es mi posición realmente porque en el fendo la experien­ cia se adquiere, pero uno también tiene criterio suficiente enmo para elegir algunas opciones. Alguien planteó distinguir entre las características riel folklore y las características de la cultura folklórica. Yo no entionco eso, me parece que ahí hay una contradicción, porque evidentemente la cultura es una sola y como cultura tiene sus propias características y que el folklore dentro de esta macrocultura es un segmenta que nnq permite potenciar nuestra conducta. Y para eso se necesita toda una categorización, una clasificación, uno taxonomía que nos permita explicar estos fenómenos» Tenemos que enfocar el problema no podamos solamente rozar la superficie sino lLe gar más allá. Entonces el problema sigue latente, todavía quedan du­ das . JUAN PEREZ : Yo pienso que lo que nosotros heno" es'-ario haciendo es justamente conversar .respecto de lo que trabajamos. No hemos plan­ teado una abstracción para llenar a delimitar un mm^eln teórico nuci­ rios permita movernos. Yo no sé pnrnué razón hay cierta tendencia de parte de algunas personas a r. chaza.' lo oren cuando yo entiendo que nadie puede llenar a una abstracción, cualquiera run olla sea ni a in tentar elaborar un,modelo teórico ni llenar o uno construcción que sea relativamente válida a esa misma persona por último, sino norte, de la cosa. Es como cuando uno nionsa, por ejemplo, cus quiere llenar a ver el e­ dificio completo, sus medidas, cuantas habitaciones tiene, las venta­ nas, el tipo de vidrias, etc», sin llegar a detenerse que eso ha sig­ nificado ir colocando en un plazo de tismpn, un ladrillo erbre otro ladrillo y otro y otro»