Cultura y recoleccion folklorica

P.8 do a la genta que cante y baile, porque dicen que esc. es pecado y hay cientos de informantes que se. han negada a enseñarme a tocar un arpa, una guitarra, a cantar, porque se la prühibe su iglesia. Esto es gra­ vísimo y hay que decirlo. Lo económico, nadie habló aquí de lo económico. Es importantísimo. Esta no es una posición política. Los campesinos dicen: yo no canto porque vendí mi guitarra porque tuve que comprar harina. Yo no canto porque el trabaja es cansador, es rudo, tenemos que trabajar de sol a sol y estamos cansados y por último la gran TU nos da eso que nosotros hacíamos antes. De modo que todo esto son problemas que yo veo son graves y que a mí me tienen bastante angustiada. l\!o quiero decir que no encuentre gente que cante y que baile, pero en comparación a cuando yo comencé hay una gran riisminucuón. En el terreno de la investigación hay nroblemas graves también. Prim£ ro, hay algunos Investigadores (con mayúscula), dejo a fuera a María Ester Brebe que yo creo que debería estar aquí, para quienes el pueblo o cada cultor es una cosa, no es un hombre. Los explotan primero, le sacan el máximo y lo tratan mal. Incluso he sabido de personas que por la fuerza han hecho al puebla entregar información. Eso es graví­ simo. También es gravísima que colegas, por envidia, vayan por los campos hablando de las personas que somos un poco más sobresalientes en este campo. A mí se me han cerrado muchas puertas porque han ido a hablar en contra de mí colegas de la familia; no hablo de personas que estén ajenas a mí, muchas discípulos míos: aquí na hay que abrirle las puer­ tas a Margot Loyola porque es una explotadora, Margot Loyola se ha en­ riquecido, porque creen que solamente silos h^n sufrido. Como a mí se me ve siempre gordíta, siempre bien, creen que yo m he sufrido y que he tenido todo en la vida. Aquí hay un problema de ética profesional señares, que tiene que termi nar entre nosotros. Yo he sabido quienes son esas personas e inclusa, ciertas tendencias políticas también. Lo sé. Eso es gravísimo...Yo no le entrega mi danza, porque se la va llevar de aquí, dicen los in­ formantes. Uri. no es de quí, na tiene nada que venir a hacer aquí. ¿Porqué quiere esa danza, para qué se la va a llevar de aquí?. Ua a ganar plata Ud. y yo me voy a quedar Bquí siempre pobre..., seña­ lan.