Ciudadanías para la democracia

88 De esa manera, nació la famosa Constitución Portaliana y no hubo otra hasta 1925. Se instauró un sistema político que -en su primera fase, la República Conservadora, hasta 1861- fue una suerte de dictadura legal con ínfimas o nulas posibilidades para que hubiese una oposición que pudiese disputar el poder mediante las vías legales. Tanto es así que durante los 30 años de la República Conservadora la oposición jamás logró elegir a uno de los suyos al Senado. Nunca, ni uno solo. Alguien dirá: “He visto en los libros de Historia que tal senador era opositor al gobierno del presidente Manuel Montt”. Sí, pero resulta que había sido elegido en la lista del bando gobernante. En algún momento entró en disidencia y, por eso, se pasó a la oposición liberal. No es que la oposición hubiese elegido a uno de los suyos, porque no podía hacerlo, debido a esta intervención brutal y descarada de la presidencia de la República en las elecciones. Este régimen era tan excluyente, no solo de los sectores populares que estaban fuera de la vida política mediante el sufragio censitario, sino incluso de los sectores de las propias clases dominantes, sobre todo de las regiones extremas (en esa época, eran Copiapó por el norte y Concepción por el sur), lo que generaba contradicciones, mucho descontento, amotinamientos militares impulsados por los liberales y guerras civiles (como las de 1851 y 1859) 25 . Entonces, el sistema tuvo que liberalizarse y se llegó durante los próximos treinta 30 años a un modo más consensuado de dirimir las disputas entre los sectores de las clases dirigentes. Los liberales entraron en el juego político, incluso, llegaron a ser gobierno. No obstante, este proceso de liberalización no logró completarse pacíficamente, puesto que una nueva guerra civil -la de 1891- terminó siendo el desenlace del traslado progresivo de los poderes del Ejecutivo al Legislativo. Si nos fijamos bien, los cambios políticos más sustantivos en nuestra historia, los que mayor duración han alcanzado, han sido mediante vía violenta, desde la Independencia hasta la instauración del modelo neoliberal de economía y sociedad que sufrimos hasta nuestros días. 25 Sergio Grez Toso, De la "regeneración del pueblo" a la huelga general. Génesis y evolución histórica del movimiento popular en Chile (1810-1910), Santiago, Red Internacional del Libro, RIL Editores, 2007 (2ª edición), págs. 295-388 y 401-438.

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