Neoliberalismo, neodesarrollismo y socialismo bolivariano

54 conservadores y socialdemócratas en la administración del mismo modelo. Todo indica que la reversión de esta etapa exigirá grandes victorias populares impuestas desde abajo 44 . En este escenario: ¿cuáles son las peculiaridades de América Latina? Justificaciones y períodos A mitad de los años setenta, el neoliberalismo latinoamericano anticipó todas las tendencias de los países desarrollados. Ese paradigma se forjó en Chile bajo Pinochet, con el asesoramiento económico ortodoxo de Hayek y Milton Friedman. Allí se experimentó la doctrina que posteriormente aplicaron otras dictaduras de la región. Estos ensayos no se extinguieron con el fin de los gobiernos militares. El neoliberalismo fue convalidado por los regímenes constitucionales que sucedieron a las tiranías del Cono Sur. Esta continuidad afianzó las transformaciones estructurales introducidas por el modelo derechista. La prioridad del neoliberalismo en la región fue desterrar la influencia alcanzada por la izquierda y el nacionalismo radical al calor de la revolución cubana. También arremetió contra la heterodoxia keynesiana de varios pensadores de la CEPAL. Su cruzada contra las reformas sociales, la redistribución del ingreso y la defensa del patrimonio nacional signó todo el período de transición postdictatorial. Con algunos cambios de formato, fueron convalidadas las principales mutaciones regresivas impuestas por los militares. En el plano económico el neoliberalismo latinoamericano atravesó por dos etapas diferenciadas. En los 80, prevalecieron las “reformas de primera generación” con prioridades de ajuste antiinflacionario. En el decenio siguiente predominó el “Consenso de Washington”, con transformaciones complementarias de apertura comercial, privatizaciones y flexibilización laboral. En el primer período se introdujeron políticas de shock para recortar el gasto público social y elevar las tasas de interés. Estas medidas fueron justificadas con criterios neoclásicos de equilibrio, que realzaban la primacía del mercado en la asignación de los recursos 45 . Estos postulados walrasianos fueron esgrimidos para exaltar el reinado de la oferta y la demanda y cuestionar la injerencia estatal. Todos los debates fueron encapsulados en conceptos neoliberales. Abundaron los estudios para mensurar el aporte de cada “factor” (tecnología, recursos naturales, capital humano) al crecimiento. Las evaluaciones de los procesos productivos fueron despojadas de sus fundamentos sociales y la enseñanza 44 Nuestra visión de la etapa en: Katz, Claudio, “Transformaciones de la era neoliberal”, Realidad Económica , n 284, mayo-junio 2014, Buenos Aires, 45 Ver: Nahon, Cecilia; Rodríguez Enríquez, Corina; Schorr, Martín. “El pensamiento latinoamericano en el campo del desarrollo del subdesarrollo: trayectorias, rupturas y continuidades”, 2006 , www.idaes.edu.ar/papelesdetrabajo/paginas

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