Aluviones y resiliencia en Atacama: construyendo saberes sobre riesgos y desastres

Aluviones y resiliencia de Atacama. Construyendo saberes sobre riesgos y desastres 98 cercana a los 30ºC. Esta anomalía cercana a 3ºC, es también responsable del relativo aumento de la cantidad de agua precipitable en la columna y de la anomalía que se observa en la cantidad de vapor de agua, también en la Figura 2.b cerca de la costa. Esta anomalía de vapor de agua se extiende a lo largo de la costa sudamericana llegando a Chile central por el sur, a regiones cuya TSM no es necesariamente anómala como consecuencia de la circulación sinóptica con viento del noroeste asociada a la circulación troposférica inducida por la baja segregada. Simulaciones numéricas efectuadas por Bozkurt et al. (2016) muestran el carácter fundamental de la anoma- lía en la zona cercana al Niño 1.2 para explicar la precipitación que se registró en la zona árida e hiperárida del Desierto de Atacama. Al remover la anomalía cálida frente a la costa de Perú, la precipitación en la zona hiperárida desaparece y disminuye notablemente en el resto de Ataca- ma. La simulación también confirma que la dinámica seca de la baja segregada no sufre mayo- res alteraciones en los experimentos en que se remueve la anomalía cálida, lo que confirma el control termodinámico de la precipitación mediante el transporte de humedad desde el norte. En resumen, la circulación de gran escala en la atmósfera y en el océano desempeña al menos dos papeles importantes en la generación de la tormenta. El primero es dinámico: la ano- malía de convección en el Pacífico central genera un patrón de teleconexión que es conducente a la formación de un bloqueo de la ruta de tormentas en el hemisferio sur. Al mismo tiempo la intensa circulación anticiclónica al oeste del Cabo de Hornos, y el quiebre de la ondas de Rossby, también parecen conectados a la formación de la baja segregada que terminará afectando el norte de Chile en los días siguientes al mínimo de OLR (como se discutirá en la siguiente sec- ción). Un segundo aspecto importante, es que la anomalía de TSM cerca de la costa de Perú, provee de vapor de agua para alimentar a la tormenta. Dado que el vapor de agua en la capa lí- mite marina está íntimamente relacionado a la TSM a través de la ley de Clausius-Clapeyron, los máximos estacionales de TSM ayudados por la anomalía dan como resultado una cantidad de vapor de agua inusual en la región de estudio que prácticamente duplica el vapor climatológico a lo largo de la costa árida del norte de Chile. Figura 3. Distribución de la anomalía de la radiación infrarroja emergente y de la anomalía de geopoten- cial en 200 hPa, una semana previo al inicio de la tormenta de Atacama. Radiación enW/m 2 .

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