Literatura, lenguaje y sociedad: 1973-1983

4 0 .que.vi4te.raljnente. repite la esfera de, lo social en los femas a .bardados;,(piénsese en Jorge Márchant: "La Beatriz¡Qvalle", Jo )Sé?;Luis..:íRosasco,: Dónde .estás-.ponstánga,. rén £ín? e.n.todas fique lias ■obras,^Pablo Hunneus, Fernando.^Émerichj ios ya nombrados, que Bernardo Subercaseaux. definió — parodiando ,a BarthgsT- co­ mo "el 1 grado xerox de la escritura'*) no hace sino afirmar el terreno en el cual nos hemos situado. De no existir estas pe queñas obritas habríamos,tenido que inventarlas, del. m^smo mo do como la gran mayoría; de los lihrqs de poesía, del último pe ríodo sólo repiten una;.inercia escritural previa al golpe mi­ litar. Decíamos, que-Ja correspondencia en literatura del e­ fecto social es la puesta en jaque del hablante-sujeto de la obra. Sí por el contrario,, afirmamos que esa correspondencia se encuentra en la reiteración de determinados temas, compro­ baremos “úna generalidad aplicable a cualquier período o cual­ quier situación. Los acentos, claro, serán distintos: del hé roe social se pasará al héroe,'.amoroso o al anti-héroe, pero el estatuto,del discurso.no habrá ,sufrido mayores modificaciones. Por el contrario, la alteración brusca y radical de ese^'esta­ tuto es lo que denuncia — en 'literatura— el paso de un-a:-si - tuación social a otra abismalmente distinta. Ahora, hablamos del .entramado que va comunicando una obra li­ teraria con otra de modo taí de que, de tiempo en tiempo, una de ellas aflora y logra interpelar el escenario de lo colectó^ vo. En ese sentido es que hemos optado por referirnos a un cuerpo. Si aislamos el cpnjunto.de lo., literario veremos que en cada obra se encuentran- presentes las. demás en alguno, de sus aspectos y que en eso desdé la süb-literatura hasta las obras más completas y ricas responden a una tensión común, la presencia de lo no literario, es decir, de lo colectivo. Diremos entonces que los temas expuestos en el conjunto de las obras tratadas guardan relación con la autoconciencia del au­ tor literario y que se puede- inteligir que, externamente, esos temas vendrían a corroborar afirmación como: "la censura no ha ejercido ningún efecto sobre mi .obra". £n efecto, dichas o bras tocan tópicos; qomunes..de la situación chilena actual co­ mo si aparentemenfre .¡quién decidiese escribir no hubiesé en - contrado ningún, obstáculo, en hacerlo. Un hecho sin embargo, contamina al resto de la comunidad de libros: algunos no han visto la luz pública, simplemente no han sido autorizados de circular. Esta.^raqlidad .necesariamente hace que el acto de escribir sea (Canceloso, s.in embargo, ello corresponde a una