Literatura, lenguaje y sociedad: 1973-1983

35 Resumiendo, el sujeto.(d p ,esa obra o el 'hablante' cuestiona su propia garantía.. Esto. significa lo...siguLgnte: a) Que el sujeto que se despliega Jfia puesto. eJ. acento en su estatuto, digamos, en su reglamentación.. ,:,Se aparece por un lado como un sujeto no impugnado, pleno, en. ;la cual cualquier duda sobre su garantía queda marginada al terr£ no de las vivencias no comunicables, vale decir, a -lo no escrito,.. En el otro extremo, el sujeto de la obra escri ta ha perdido su garantía, no accede a una definición, uní voca y'cualquier fijeza es sólo, la consecuencia del pro-cesamiento, de sus diversos estados. b) Que la relación del sujeto cop. lo colectivo va desde una relación también garantizada, donde las palabras funcio­ nan como intermediarios absolutamente transparentes de una comunicación feliz. Es, haciendo una analogía, equi valente a una relación lineal entre individuo social y sociedad como si esta última siempre fuese únicamente la proyección multiplicada del individuo. Por otra parte, y ese es el otro límite, el hablante no tiene ninguna ga rantía del lenguaje como presencia de lo colectivo en la obra, pasando éste a ser, en el interior de ellas, un campo no reductible a la intencionalidad manifiesta del sujeto. c) Que la relación del sujeto con su discurso va desde una relación historizada, en la cual la tradición literaria en sus diversas manifestaciones dominantes (poesía líri­ ca, epigramática, coloquial y denunciativa) preserva al hablante de la obra de cualquier opacidad. Las palabras son, en ese extremo, el terreno dado por absoluto y siem pre podrán obedecer cualquier intencionalidad. El otro extremo es una relación con el discurso fracturada, en la cual ienumpen nuevos soportes y donde la pretensión de totalidad es consecuencia de la pérdida de garantías pro­ venientes del mundo 'natural*. Ahora bien, lo que las obras literarias producidas en Chile con posterioridad a septiembre de 1973 nos muestran es el proceso entonces de crisis de la autonomía del sujeto de esas obras. Ya la antipoesía nos había adelantado algo al respecto, aparece con ella en nuestra poesía el discurso de mala fe, donde el ha