Aportes al mejoramiento en la cadena de valor hortícola de la provincia de Chacabuco

46 APORTES AL MEJORAMIENTO EN LA CADENA DE VALOR HORTÍCOLA DE LA PROVINCIA DE CHACABUCO Una buena preparación de la almaciguera es clave para la buena obtención de plántulas para su posterior trasplante. Por lo general, se busca establecer las plantas en un sustrato de buena calidad, con alto contenido de materia orgánica, aireado y poroso (mezclas de turba, vermicompost o tierra de hoja por ejemplo), de forma que las semillas puedan germinar y desarrollar raíces firmes. El hacer los almácigos permite cuidar mejor las plantas para el control de las malezas, el riego y en algunos casos permiten proteger las plántulas cuándo se hacen bajo plástico, incluso apurando su crecimiento respecto de lo que ocurriría si se siembran directo en el campo. Siembra en cancha: Este formato considera necesariamente un trasplante a raíz desnuda, es decir, cuando las plantas ya tienen el tamaño adecuado (5-15 cm según la especie), estas se deben arrancar (Figura 39) y procurar trasplantar en un plazo muy breve para evitar la deshidratación de las plantas. Las raíces expuestas están sujetas a una alta deshidratación. Para facilitar tanto el crecimiento como la extracción de las plantas, es común que las canchas sean acondicionadas previo a la siembra con tierra de hoja y guano, mezclada con el suelo. Es frecuente el uso de túneles para proteger las plantas y mejorar la condición de humedad y temperatura de las almacigueras. En condiciones calurosas se debe reemplazar túneles plásticos por malla de sombra para evitar los excesos de calor. Figura 39. Almacigueras en canchas y plantas a raíz desnuda listas para el trasplante. Siembra en contenedores. La mezcla de sustrato para los contenedores comúnmente considera la utilización de turba y/o perlita como base en una relación de 70/30 - turba/perlita. Sin embargo, pueden existir múltiples alternativas que cumplen la función de mejorar la estructura y porosidad del sustrato de los almácigos. Las bandejas o contenedores con las plantas pueden colocarse en cámaras de germinación para apurar el proceso y luego ser llevadas a un invernadero o simplemente pueden ser colocadas en los mismos túneles plásticos. La protección de los contenedores permite dar mayor cuidado a las plantas, evitando problemas de heladas y apurando los cultivos por la obtención de mayores temperaturas de crecimiento. Los contenedores pueden ser de plumavít, de plástico termoformado o plástico inyectado, con volúmenes y número de cavidades variables según cada tipo, las que pueden variar desde 4 cm3 a 150 cm3 y desde 450 a 32 cavidades. Algunas especies se desarrollan mejor en ciertos tamaños tal como se señala en el Cuadro 14. VOLUMEN (cm ) 135 43 24 10 CAVIDADES (N°) 84 135 240 432 ESPECIES Sandía, melón, pepino, zapallo Pepino, pimiento, tomate Repollo, coliflor, apio Cebolla, lechuga, tomate industrial Cuadro 14. Alternativas de utilización de contenedores como almacigueras para diversas especies según su volumen. Nota: ejemplos de tamaños en base a bandejas de plumavit. Existen otros formatos y tamaños para bandejas termoformadas e inyectadas.

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