Aportes al mejoramiento en la cadena de valor hortícola de la provincia de Chacabuco
45 CAPÍTULO III Siguiendo el esquema anterior, el ajo combina muy bien con la berenjena u otras Solanáceas de la misma familia (verde), probablemente por los diferentes espacios que ocupan, siendo el ajo una planta pequeña de raíces superficiales y la berenjena muy grande; además, el ajo repele algunos insectos que pudieran ser perjudiciales para la berenjena. Por el contrario, el ajo no combina bien con las Brásicas (brócoli, coliflor, repollo), posiblemente porque todas las especies tiene raíces superficiales y compiten por los mismos nutrientes. Por otra parte, cultivos como las Leguminosas (arvejas y habas) combinan bien con las Brásicas, pero no combinan bien con las Aliáceas (ajo y puerro). En el caso de algunos cultivos que dejan mucho espacio libre entre hileras o en alguna etapa de su ciclo productivo, es posible establecer cultivos asociados en esos espacios libres. Un ejemplo de esto es el espárrago, en el cual una vez cosechado es factible establecer cultivos de ciclos cortos como la lechuga. De acuerdo a algunos ensayos, se ha comprobado que la asociación zanahoria con lechuga puede llegar a requerir de aproximadamente un 75% menos de superficie que un monocultivo para obtener la misma productividad. De la misma forma, el cultivo intercalado de pimientos con repollo, rúcula, lechuga o rábano, permite obtener la misma productividad con menos superficie. SIEMBRA Y TRANSPLANTE Habiendo definido qué cultivo se adapta a una condición climática determinada y a qué mercado u objetivo se espera llegar con un producto de calidad, se debe planificar la manera de establecer el cultivo en cuestión. En este sentido las posibilidades son una siembra directa o almácigo-trasplante, en este último caso, las plántulas crecen inicialmente más protegidas para acelerar su crecimiento y no perder semillas, y luego se realiza el trasplante al terreno definitivo. Por lo general semillas grandes se siembran directamente en terreno y aquellas más pequeñas en almácigo, ya sea en canchas para su trasplante a raíz desnuda o en contenedores individuales para su trasplante con un cubo de raíces y sustrato o cepellón. La calidad de la semilla utilizada será muy importante ya que para obtener un buen cultivo y no perder plantas, se debe contar con un buen porcentaje de germinación, lo que se logra a través de semillas de procedencia conocida y en sobre cerrado, con la debida información de la variedad y porcentajes de germinación. En la preparación de la siembra se debe considerar que las semillas deben permanecer húmedas y en contacto con el suelo, para germinar, arraigar y crecer adecuadamente. Si se siembran en su lugar definitivo, el suelo debe estar bien mullido y húmedo antes de sembrar, para evitar que la semilla quede entre terrones o en un lugar seco. Es fundamental asegurase que las semillas no queden muy profundas (nunca más de 3 veces su tamaño). En el siguiente cuadro hay algunos ejemplos de las especies y los formatos de establecimiento. Acelga Arveja Betarraga Cebollín Choclo Ciboulette Cilantro Espinaca Haba Hinojo Lechuga Ají Alcachofa Apio Berenjena Berro Brócoli Cebolla Coliflor Espárrago Lechuga Melón Melón Pepino Perejil Poroto Rábano Sandía Zanahoria Zapallito Italiano Zapallo Pimiento Puerro Repollito Repollo Sandía Tomate Maíz dulce SIEMBRA DIRECTA ALMÁCIGO Y TRANSPLANTE Cuadro 13. Opciones de siembra de semillas de hortalizas.
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