CENECA Seminario teatro chileno en la década del 80
1 09 . . IVA, hacer estreno con críticos, conquistar a los periodistas para obtener crónicas previas al estreno de tal manera que informen al público oficial para que asista a la sala. En suma, tratar de atraer a una burguesía que cada vez más se retira definitivamente del tea tro, que incluso ha rechazado a sus propios exponentes como el tea tro de Silvia Piñeiro o el Teatro Casino Las Vegas. Una burguesía que con nosotros mantiene una actitud ambigua, entre la atención y la sospecha, oobre todo, la sospecha. En este sistema mixto caen incluso los teatros subvencionados por las Universidades, que se han dedicado a un público escolar o de instituciones, ciólo el fin de semana lo destinan a un público general. El uso de todo este siste ma tiene la intención de tratar de mantener una forma heredada de hacer teatro, que se corresponde con la idea de que en Chile existe teatro, existe un público de teatro, que existe una burguesía urba na, capitalina, que normal y "naturalmente" asiste y mantiene al teatro profesional. Creo que desde los últimos dos años estamos al borde de que Chile sea un país en el que no hay teatro. Por lo tanto, como ese peligro ya las compañías lo están bliendo, han.es> cado buscando nuevas formas de llegar a los públicos : ya sea yen do a los lugares e n que estos se encuentran o llevándolos organiza damente a sus salas. Y esto, como digo, lo hacen ya los teatros subvencionados. El teatro de la Universidad Católica, por ejemplo, es prácticamente un teatro estudiantil. Sus repertorios se eligen para este tipo de público y sólo un 10% de su público no correspon de a los estudiantes secundarios. En fin, todos estamos en lo mismo. Yo no se qué va a pasar. Al- aún día tendremos que acordar que definitivamente este es un país sin teatro y que debemos buscar una forma alternativa de realizar lo. Por lo demás, esto ocurre en muchos otros países del mundo. 3e hacen FestivaTes de este tipo de teatro, que atraen mucho más la atención que el teatro profesional. A lo mejor tendremos que dejar de ser profesionales. Asusta esto, aterroriza, Pero es al- f?o que hay que empezar a considerar. Inter nacionalmente incluso, tampoco se habla ya de teatro aficionado. Este es un término bas tante obsoleto, oe comienza a hablar de teatro alternativo, es de cir. el que no es oficial, ni subvencionado ni comercial. Por lo demás, en nuestro caso, la diferencia entre el teatro profesional
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=