La vida santiaguina

LA ETIQCETA COLONIAL 39 pelear i a morir en honieiiaje a l a mas hernioss (lama. Las fhrniulas de l a etiqueta oficial dieron el tono a la etiqueta particular. La conlianza i la familiaridad eran pnlabras cuyo significado a p h i s se conocia en e l sen0 de las farnilias. Se vivia eternamente con e l sombrero en la mano i con l a respetuosa sonrisa en 10s labios. I a t a l estrenio lleg6 tanibien l a etiqueta social, que e l primer ataque de nervios que se recuerda, fu8 e l de l a linrla i elcgante, aunque ya algo vieja, marquess de Caiiada Hermosa, que a1ver a1 oidor Diez de Arteaga presentarse distraidamente en su salon, con e l sombrero puesto, sufri6 un verdadero espasmo, de que solo pudieron salvarla las atenciones del doctor Esponda, medico a la moda en aquella 8poca. Desde enthnces 10s ataques de nervios se re- pitieron i tuvieron su mas alia boga a princi- pios del presente siglo. Esos ataques nerviosos s r an tambien las Gltimas convnlsiones de una sociedad que cifraba todo SLI espiritu en una serie de fhrmulss ceremoniosas, en un centenar de frases ernpalagosas i altisonantes. La revo- liicion asomaba su cabeza entre las brumas ya

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